El seguro específico para compensar los daños producidos por los ataques de lobos y perros asilvestrados en las explotaciones de la Comunidad, iniciativa de choque en forma de sistema de contratación aprobada hoy por el Consejo de Gobierno, marca un plazo máximo de 60 días para que los ganaderos reciban la indemnización y tiene efecto retroactivo al 1 de enero de este año.
Estas son algunas de las novedades de la póliza, que se suscribirá mañana entre la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y la compañía aseguradora y que los agricultores y ganaderos podrán contratar a partir del lunes, según explicó el titular del departamento, Antonio Silván, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Silván defendió, ante los recelos con que han acogido los representantes de las organizaciones agrarias esta iniciativa, que los ganaderos tendrán un menor coste que con las pólizas actuales y que no tendrán un recargo en caso de alta siniestralidad mientras sí tendrán bonificaciones en el caso contrario.
Con su aprobación, se cumple el compromiso adquirido por la Consejería de poner en marcha un sistema específico antes de la finalización del año, recordó el consejero, quien subrayó los 0,35 céntimos de euro por cada cabeza de ganado ovino y caprino, lo que supone 35 euros al año para una explotación tipo de cien ovejas, que en el caso de una granja de cien vacas sube a 175 euros, 1,75 euros por animal.
A este seguro, que tiene una aportación de 425.000 euros de la Junta de Castilla y León, se podrán sumar todos los ganaderos que realicen su actividad en la Comunidad y que así lo soliciten sin la necesidad de suscribir otros servicios. Además del beneficio en el coste, el consejero destacó una mayor rapidez para recibir la compensación por los daños y recordó que un expediente de reclamación por responsabilidad patrimonial tarda entre seis y once meses en resolverse.
Cambio del estatus. El titular de Fomento y Medio Ambiente incidió en la necesidad de cambiar el régimen de protección del lobo para que sea uniforme, ya que al sur del Duero está protegido y al norte es especie cinegética, línea en la que se aprobó una iniciativa en las Cortes para instar al Gobierno a que tome las iniciativas y se cambie la normativa por las instituciones europeas.