Los funcionarios del Ayuntamiento de Segovia, que integran una plantilla de unos 550 empleados, deberán acudir “una o dos” tardes al Ayuntamiento para cumplir con el aumento de la jornada laboral para los trabajadores del sector público ordenada por el Gobierno de Mariano Rajoy. El Gobierno local (PSOE) se reunirá con los sindicatos con representación municipal para concretar las condiciones que permitan a los empleados públicos completar las 37 horas y 30 minutos de trabajo a la semana, 2 horas y 30 minutos más de trabajo que en la actualidad.
Así lo aseguró ayer el alcalde, Pedro Arahuetes (PSOE), que se mostró crítico con las medidas de contención del gasto y recorte adoptadas por el Gobierno de España del PP y que impedirá ofertar nuevas plazas de empleo público para 2012 y ni siquiera cubrir las vacantes que, en el caso del Ayuntamiento de Segovia, se producen por jubilación.
Al contrario de lo anunciado ya por algunos municipios, en el Ayuntamiento de Segovia «no se va a despedir a nadie», aunque «no vamos a sacar ninguna plaza», dijo el alcalde, quien explicó que el propósito es amortizar las plazas vacantes en favor el ahorro de las arcas municipales y que, en consecuencia, el trabajo se repartirá entre el resto de funcionarios.
A juicio del alcalde, el personal del Ayuntamiento «no está sobredimensinado» porque «tenemos el que necesitamos», dejando entrever que la economía municipal tendría incluso capacidad para sacar varias plazas a concurso aunque «no lo haremos porque no nos dejan (…) hay que cumplir los acuerdos del PP«. Aunque la plantilla de funcionarios ronda los 550, Arahuetes precisó que el Ayuntamiento facilita unos 1.000 empleos directos, de los trabajadores de las empresas subcontratadas para la prestación de servicios; mientras que son «son miles» los empleos indirectos que se generan como consecuencia de la actividad de la administración local segoviana, dado que el gasto que realiza por el consumo de electricidad o gasóleo supone importantes ingresos a empresas del sector.
El alcalde insistió en que las vacantes en la plantilla municipal se producen, en su inmensa mayoría, porque los empleados alcanzan la edad de jubilación y reiteró que no serán cubiertas. Según precisó, en 2011 un total de 10 personas causaron baja en el cuerpo de empleados municipales, y en 2012 tan solo una persona se desvinculará del Ayuntamiento por jubilación. En 2013 serán un total de 12 funcionarios, según adelantó el alcalde, quienes abandonarán, también por jubilación, la plantilla municipal. Asimismo, Arahuetes lamentó que la ‘congelación salarial’ de los empleados municipales en 2012 se verá agravada por la subida del IRPF. «¿Congelación salarial?, es que no solo no les sube el salario, sino que encima se va incrementar el IRPF,y eso es para todos, son hechos que prefiero no valorar», dijo, resignado. Por otra parte, el alcalde teme que la aprobación de los presupuestos municipales tenga que aplazarse al mes de marzo o abril puesto que existe una “incertidumbre total” en aspectos como el impacto de la subida del IBI o las aportaciones procedentes de la administración central y autonómica.
