La Asociación de lucha contra las enfermedades renales (Alcer) ha mostrado su oposición a la aplicación del copago en el transporte sanitario para el desplazamiento de los pacientes de diálisis, así como en la adquisición de medicamentos. Los representantes de Alcer consideran que estas medidas pondrían en peligro el tratamiento de los enfermos renales crónicos y por tanto su salud.
En Segovia hay 61 pacientes que están en hemodiálisis, de los que 52 utilizan el transporte sanitario, 20 para acudir al centro concertado Los Olmos y 32 a la Unidad de Diálisis del Hospital General.
La junta directiva de la Federación Alcer de Castilla y León ha acordado solicitar a la Consejería de Sanidad una entrevista urgente con sus responsables para recibir información detallada del alcance del contenido del real decreto 16/2010, de 20 de abril, de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones, y para que la Administración autonómica concrete cómo se va a aplicar la norma del Gobierno central en Castilla y León.
La organización Alcer recuerda que la enfermedad crónica obliga a un modo de vida que tiene particularidades especiales y que este Real Decreto no recoge. “El copago sin límite del transporte sanitario no urgente, como el que necesitan los pacientes renales en tratamiento de hemodiálisis, pone en peligro la salud de los mismos si se tiene en cuenta que muchos de ellos no podrán asumir su desplazamiento a un tratamiento vital o acudirán menos de lo que sería necesario”, ha advertido la federación regional. La mayoría de los pacientes tienen que ir a las unidades de diálisis tres veces en semana, pero hay personas que necesitan cuatro, cinco o incluso seis sesiones, dependiendo de su situación y de las patologías asociadas.
La Asociación de Lucha contra las Enfermedades Renales también ha indicado que el pago de medicamentos va a ser “inasumible” para los enfermos y muchas personas se verán empujadas a prescindir de medicamentos esenciales para su tratamiento por su alto coste.
Alcer cree que dentro de los Presupuestos Generales del Estado y de los autonómicos existen otras partidas desde las que se podrían destinar fondos para financiar los costes sanitarios, y espera que un análisis profundo de la problemática especial de los enfermos renales crónicos sirva para modificar las medidas recientemente instauradas.
