La cueva prehistórica de Los Enebralejos, en Prádena, acaba de concluir las obras de reforma de sus instalaciones, consistentes en la renovación de su Aula Arqueológica y la sustitución de la iluminación de la cavidad por otra de tipo LEB.
El Aula Arqueológica, situada encima de la cueva de Los Enebralejos, cuenta a partir de ahora con nuevos paneles explicativos y nuevo mobiliario, en un intento de que la instalación resulte atractiva para el público y cumpla su objetivo de dar a conocer la relevancia de la cavidad. De esta actuación se ha encargado la empresa ‘Sercam’, que ha contado con la financiación de la Dirección General de Patrimonio de la Junta. El presupuesto de esta intervención ha rondado los 20.000 euros.
De forma paralela a esta mejora de Los Enebralejos, en el interior de la cavidad se ha instalado iluminación de tipo LEB, que permitirá una mejor conservación de la caverna, puesto que su ‘luz fría’ impide la aparición de hongos. Según explicó ayer Javier Moreno, propietario de la empresa concesionaria de Los Enebralejos, la cueva de Prádena es la segunda de España que ha colocado iluminación de tipo LEB.
Las obras, que han supuesto la colocación de cerca de 150 focos de tipo LEB, han sido realizadas por la empresa ‘Dovelux’, con un presupuesto de 41.000 euros. De esta cifra, la Dirección General de Turismo de la Junta ha asumido el pago de 35.000 euros, encargándose del pago de la cantidad restante el Ayuntamiento de Prádena.
Con la renovación del Aula Arqueológica y la iluminación concluye el cambio de imagen de la cueva, iniciado en 2008 con la renovación del poblado prehistórico situado en la superficie.
De acuerdo con las previsiones que maneja el empresario Javier Moreno, el año 2010 concluirá con cerca de 28.000 visitantes.
En el horizonte más cercano, la empresa concesionaria pretende crear un “Club de Rastreo” en la cavidad con la pretensión de estudiar su fauna, en especial sus microorganismos, de cara a publicar un estudio al respecto. A medio plazo, el Ayuntamiento continúa con la idea de acoger, en el casco urbano, un museo donde vayan a parar los hallazgos de Los Enebralejos, de forma que contribuya a atraer al pueblo a los miles de visitantes que cada año acuden a la cueva. “Nos gustaría que el pueblo pudiera beneficiarse económicamente de las visitas que se producen a la cueva”, señaló ayer la alcaldesa de Prádena, María Luisa Quintana (PP).