Los depósitos bancarios de hogares y empresas volvieron a crecer en el primer trimestre de este año en Castilla y León pese a la inflación en comparación al mismo periodo de 2023 y se situaron a finales de marzo en los 78.681,5 millones de euros, el segundo mayor dato de la serie histórica en esos meses.
Por provincias, los depósitos bancarios, crecieron en todos los territorios de la Comunidad, excepto en Valladolid (16.927 millones de euros), donde se contrajeron un 1,7 por ciento. Por el contrario, Segovia es una de las provincias donde más crecieron los depósitos en el último año, un 3,2 por ciento, (4.816,8 millones). Solo le supera León, que con 14.128,7 millones de euros, experimenta un crecimiento del 3,3 por ciento.
Por debajo de Segovia, se encuentran Zamora (5.857,6), un 2,9 por ciento. Asimismo, los depósitos aumentaron en Salamanca (10.528,5 millones de euros), un 1,1 por ciento; en Burgos (12.483,6 millones9, un 0,7 por ciento; en Ávila (4.752.920), un 0,5 por ciento; y en Palencia (5.372,3), un 0,1 por ciento. En Soria (3.813,7), permanecieron estables.
En cuanto a la inversión crediticia, el comportamiento de nuevo en este caso fue a la inversa que en los depósitos, con bajadas en ocho provincias y un aumento solo en Valladolid (14.121,3 millones de euros), del 0,8 por ciento. En concreto, menguaron en Segovia (2.602 millones de euros), un 4,3 por ciento; en Ávila (1.944,2 millones), un 3,2 por ciento; en Palencia (1.864,3), un 2,8 por ciento; en Salamanca (5.247,6), un 2,7 por ciento; en León (6.448) y Soria (1.668,1), un 2,2 por ciento, en ambos casos; en Zamora (2.378,2), un 1,7 por ciento; y en Burgos (7.165,1), un 1,1 por ciento.
El sector privado fue el responsable del aumento de los depósitos del sistema financiero en la Comunidad, durante los meses de estudio, ya que aportaban al finalizar el primer trimestre de 2024, 74.809,3 millones de euros, un 1,3 por ciento más que en 2023 (73.855,6). Por el contrario, las administraciones públicos contaban con 3.872,1 millones de euros en depósitos, con una merma del 5,9 por ciento en relación al dato de 2023.
El retorno a conservar el dinero vuelve a contrastar en la Comunidad con una merma de la inversión crediticia, que se situó en el cierre del trimestre de inicio del ejercicio en los 43.439,2 millones de euros, un 1,3 por ciento menos que en el mismo periodo de 2023. La cifra es la tercera más baja de la serie, solo por debajo de los 43.259 millones de 2019; y los 43.464 de 2021.
En el caso de los créditos bancarios, el comportamiento del sector privado y del público fue inverso al de los depósitos. Así, la inversión crediticia privada se situó en los 38.322,4 millones de euros, con una descenso de dos puntos porcentuales en comparación al año anterior; mientras que la pública sumó 5.116,8 millones, que representan un incremento del 4,1 por ciento.
La diferencia entre créditos y depósitos se situó en los 35.242,2 millones de euros, a favor del ahorro en la Comunidad, cuando un año antes esa cifra estaba en los 33.949,8 millones, cuantías que permiten financiar otras economías.
