La acumulación de nieve en los accesos y puertas de los centros de salud y puntos de atención continuada dejó atrapados durante parte de la noche del sábado y la mañana del domingo a los equipos sanitarios de Urgencias tanto en la capital como en varios pueblos de la provincia. Durante horas fue imposible sacar los coches, con los que se desplazan los médicos y enfermeras, de los garajes y aparcamientos de los centros de guardia en puntos como Navafría, Villacastín o el Servicio de Urgencias de Atención Primaria de la capital, situado en el barrio de San Lorenzo, entre otros.
Los profesionales sanitarios sortearon las dificultades acudiendo andando a los domicilios donde se encontraban los enfermos y en los casos de mayor emergencia y dificultad de traslado recurriendo a la Guardia Civil o Policía Local. “No hemos podido usar el coche porque estábamos bloqueados por la nieve y hasta que no han venido los bomberos con una pala a limpiar el acceso a las once de la mañana no hemos podido acudir a los domicilios, más que andando”, comentaban ayer los médicos del SUAP de San Lorenzo pidiendo más agilidad para despejar las entradas del servicio de Urgencias.
La atención a los avisos que inicialmente correspondían a patologías leves se pospuso varias horas. “Hay urgencias que no estaban justificadas por la gravedad sino que eran personas que llamaban por la dificultad que tenían de moverse por la ciudad o pueblos próximos hasta el SUAP, pero es que era la misma dificultad que teníamos nosotros para ir a su casa”, apuntan los sanitarios.
Los problemas de tráfico también impidieron que llegaran a los centros de guardia los compañeros que debían dar el relevo, de forma que varios equipos prolongaron sus turnos. “Llevamos 24 horas seguidas trabajando y no sabemos cuándo llegará el siguiente turno y podremos irnos, porque tenemos la obligación profesional y el deber moral de continuar, no vamos a dejar el servicio solo” decían sanitarios desde Villacastín ayer a las tres de la tarde.
Incluso médicos que estaban de descanso en sus casas dieron asistencia a vecinos de sus pueblos para evitar que salieran a la carretera.
El presidente del Colegio de Médicos de Segovia, Enrique Guilabert se deshace en elogios hacia sus colegas. “Es loable el esfuerzo y la dedicación que hacen médicos y enfermeras en estos días difíciles en los que son capaces de dar respuesta a situaciones complicadas y alargan las guardias para que los compañeros que les dan el relevo vayan con seguridad y no corran riesgos”. “Hay que agradecer la labor de los sanitarios —dice Guilbert— y también destacar la buena predisposición de Guardia Civil y de la Policía Local que cuando se necesita nos abren camino a los servicios sanitarios”.
