Los escándalos sexuales en la Academia Sueca se han cobrado una víctima más: El Nobel de Literatura de 2018 tendrá que esperar un año más, y el galardón de más prestigio en el mundo de las letras se ha pospuesto hasta el próximo año, en el que de manera insólita se concederán dos premios.
La Academia Sueca, sumida en su mayor crisis, anunció ayer la decisión de no conceder el Nobel de Literatura de este año, según informó la Fundación Nobel a través de un comunicado.
La decisión de posponer el fallo “se tomó a la luz de una academia numéricamente debilitada y con una confianza reducida en el resto del mundo”, según anunciaron los responsables de la institución a través de un comunicado.
La medida, que es la primera vez que se toma, ha sido adoptada tras la polémica surgida con las denuncias por acoso sexual del marido de una de las integrantes de la entidad, que ha llevado a una serie de miembros de la junta a abandonar la institución. La última vez que no se otorgó el premio de literatura fue en 1943, en el momento álgido de la Segunda Guerra Mundial.
Durante los últimos tres meses, las noticias que surgían de la Academia Sueca venían unidas a los escándalos de abusos sexuales que han acabado derivando en sucesivas dimisiones.
Sólo en el último mes han salido seis personas y la última renuncia ha sido la de la académica Sara Stridsberg, después de la de Katarina Frostensony y de la encargada de anunciar el Nobel de Literatura, Sara Danius.
La causa de la crisis
Fronstensony es la esposa de Jean-Claude Arnault, fotógrafo y cineasta francés acusado de abusos sexuales por 18 mujeres. La denuncia se hizo pública en noviembre de 2017 y los casos de abusos, e incluso de violación, fueron cometidos presuntamente entre 1997 y 2007.
Según ha trascendido, muchos responsables de la Academia conocían lo sucedido en los apartamentos que tiene la institución en París o Estocolmo. Arnault dirigía un proyecto cultural con fondos de la Academia.
La Fundación admite que el premio Nobel debería ser entregado cada año, pero recuerda que las decisiones sobre los galardones han sido aplazadas en varias ocasiones durante la historia de los premios. “Una de las circunstancias que puede justificar una excepción es una situación tan grave en la que la institución que galardona considera que la decisión de conceder el premio no sería percibida como creíble”, informó la institución.
Pese a que el proceso de selección de candidatos transcurría al ritmo habitual, la Fundación cree necesario que la “Academia tenga tiempo para recuperar su fuerza plena, involucrar a una cantidad mayor de miembros activos y restaurar la confianza en ella antes de elegir un nuevo galardonado”.
La Fundación Nobel espera que la Academia Sueca ponga “todos sus esfuerzos” en restablecer su “credibilidad” como institución y que informe de las acciones concretas que emprenda a partir de ahora. Asimismo, espera que todos los miembros de la institución se den cuenta de que “los esfuerzos de reforma de la estructura organizativa deben caracterizarse por una mayor apertura hacia el mundo exterior”.
El Nobel de Literatura solo ha quedado desierto en 1935 y no se ha concedido en 1914, 1918, 1940, 1941, 1942 y 1943, como consecuencia de las dos guerras mundiales. Además, se ha pospuesto en otras siete ocasiones, a falta de un “candidato adecuado”, pero en estos casos (1915, 1919, 1925, 1926, 1927, 1936 y 1949) siempre ha terminado por darse, la mayoría de ellos al año siguiente.
El movimiento ‘Me Too’ aplaudió la noticia y numerosas personalidades destacaron que esta iniciativa contra el acoso sexual haya tenido tanta repercusión.
