La campaña de vacunación contra la gripe para la temporada 2018-2019 comenzó el pasado 23 de octubre y se prolonga hasta el próximo 14 de diciembre. En torno al ecuador de la campaña, el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia, Javier López-Escobar, ha acudido al Servicio Territorial de Sanidad para vacunarse y recomienda a todos los ciudadanos que todavía no lo han hecho a pedir cita para recibir la vacuna en su centro de salud.
La Consejería de Sanidad insiste en la importancia de protegerse contra el virus de la gripe para evitar el agravamiento de otras patologías y la mortalidad relacionada con esta afección. La elevada cobertura vacunal alcanzada durante los últimos años es una garantía para la protección de la salud de los ciudadanos, según remarca la Administración sanitaria.
La Junta de Castilla y León ha puesto en marcha este otoño la campaña autonómica de vacunación con una importante novedad: la incorporación de la vacuna tetravalente, con cuatro cepas gripales y cuyo propósito es cubrir todas las posibilidades de circulación del virus B de la gripe entre la población de hasta 64 años. Para las personas de 65 años y mayores, la vacuna recomendada sigue siendo la de tipo adyuvada con inmunogenicidad reforzada.
Las dosis de vacuna frente a la gripe destinadas a la provincia de Segovia en esta temporada son 38.000, que incluyen 26.000 dosis de vacuna antigripal reforzada para población de 65 años en adelante, ya que se trata de una formulación especialmente elaborada para mejorar la respuesta inmunológica frente al virus en personas que normalmente la presentan baja; y 12.000 dosis de tetravalentes que se destinan a población de entre seis meses y 64 años.
Compromiso social
Desde la Delegación de la Junta insisten en la importancia de la vacunación de los profesionales sanitarios y sociosanitarios, así como de toda persona que esté en contacto directo con los grupos de riesgo, no sólo como medio para su autoprotección y la de su entorno más cercano, sino también como compromiso social y medida preventiva para evitar la transmisión del virus a los pacientes a los que atienden y a los que la enfermedad podría agravar sus patologías previas.
Las vacunaciones sistemáticas, como las de la gripe, constituyen una intervención sanitaria eficiente de gran repercusión para la prevención de enfermedades infecciosas que pueden afectar los ciudadanos. “Son, por tanto, la principal medida preventiva, ya que no sólo protegen a las personas inmunizadas sino que, al limitar el contagio entre individuos, dificultan la transmisión de la enfermedad entre personas no vacunadas”, señala la Junta.
Sanidad ofrece la vacuna de forma universal, voluntaria y gratuita a las personas a las que está recomendada, bien para prevenir complicaciones graves —que en algunos casos pueden llegar a ser mortales— en su estado de salud y en las dolencias de base previas, o bien para evitar que puedan contagiarse por el consecuente peligro de transmisión a otros grupos poblacionales, con el perjuicio social por bajas laborales o por el riesgo de su actividad que podría ocasionarse.
