“Puede que nos falten abrazos, besos o apretones de manos, pero no os quedaréis sin el aplauso de este teatro abarrotado que admira vuestra entrega, vuestras ganas y vuestra dedicación”. Con estas palabras de cariño hacia los deportistas y sus familiares Elena Gutiérrez, la primera presidenta de la Asociación Segoviana de la Prensa Deportiva, abrió la trigésimo séptima edición de la Gala del Deporte, que fue la de los reencuentros con unos premios que se han convertido en una referencia en el calendario de los deportistas y que en el año 2021 se quedaron en el arcón de los deseos incumplidos por culpa de la pandemia, en una época demasiado triste que vivió también la marcha de una decena de segovianos extraordinariamente vinculados al mundo del deporte.
Por ello, en cuanto se pudo abrir una ventana de oportunidad, la nueva Junta Directiva de la ASPD con Elena Gutiérrez a la cabeza, pero bien asesorada por el presidente saliente, Álvaro Gómez, decidió recuperar este momento de encuentro en el Teatro Juan Bravo, que recibió con sus mejores galas a deportistas y familiares, a representantes de las instituciones y patrocinadores, imprescindibles en su colaboración, y a periodistas e invitados ilustres como Alfonso Reyes y Pepe Domingo Castaño que recibieron con una humilde sonrisa el reconocimiento a toda una trayectoria.
Un premio, y una motivación
De la mano del periodista Santiago Herrero, que fue desgranando los méritos de la larga treintena de premiados en la Gala, los deportistas fueron subiendo al escenario del Teatro Juan Bravo para recibir el merecido aplauso, amén del galardón que cumple siempre con la doble función de premio por lo realizado, y de acicate para continuar.
Bien lo han entendido los dos deportistas olímpicos que Segovia envió a Tokio. Javi Guerra y David Llorente dieron lo mejor de sí mismos en unos Juegos iguales, pero distintos a otros, como lo hicieron también los periodistas José Rodríguez y Sergio Mateo, una referencia para que los jóvenes proyectos de periodistas entiendan que la pasión por la profesión es tan importante como los conocimientos acerca del periodismo.
La ‘Serie Olímpicos’ galardonó tanto a los deportistas que tomaron parte en los Juegos como a los periodistas que informaron desde Tokio
Ellos formaron parte de la ‘Serie Olímpica’ que dio paso a una ‘Serie Oro’ de lo más femenina, con la atleta Águeda Muñoz Marqués, la triatleta Marina Muñoz y el equipo femenino de fútbol sala de Segosala demostrando que el futuro es todo suyo, como lo es el presente de la pelota en la figura de Carlos Baeza.
Un futuro esperanzador
El futuro también es de Jimena Velasco, una referencia en el pádel, y de las porteras de fútbol sala Míriam Aragoneses o Cristina Montull, que ya han llegado a la élite del sala femenino. Ellas compartieron ‘Serie Plata’ con figuras ya consagradas del deporte segoviano como el atleta David López Castán y el árbitro Germán Cid Camacho, No faltaron tampoco los premios a los ascensos de clubes como el Claret, la Gimnástica Segoviana o el Monteresma.
Otros clubes también aportaron su grano de arena a la Gala, con exhibiciones de esgrima y de gimnasia rítmica que contribuyeron a poner un tono aún más polideportivo al evento. Las menciones especiales vinieron a destacar el trabajo que vienen realizando tanto deportistas individuales como Ángela Rodríguez en tenis de mesa, o Álvaro Llorente en taekwondo entre otros, pero también el que durante muchos años llevaron a cabo Darío Ajo o Bruno Vírseda en el Balonmano Nava, Diego Navarro ‘Pluma’ en el CD La Granja, o Paco Monjas en el siempre complicado universo del arbitraje.
Trayectorias intachables
La Gala fue subiendo en emoción con la llegada de los premios a la trayectoria deportiva que recogió Alfonso Reyes en su nombre y en el de su hermano Felipe, ambos convertidos en toda una institución en el mundo de la canasta, y tuvo su momento álgido cuando Pepe Domingo Castaño subió a recoger el premio ‘Pablo Fierro’ a una intachable trayectoria profesional de medio siglo.
Tras los discursos institucionales, no faltó el guiño a la solidaridad con la entrega a AFA Segovia de dos de las letras decorativas que presidían el evento, que concluyó con un cocktail que se llevó a efecto en el Palacio de Segovia.
