La puesta en marcha de la nueva autovía del Pinares (A-601) entre Valladolid y Segovia ha servido para impulsar el uso de la autopista AP-61 (Segovia-San Rafael) este año. Y lo mismo ha ocurrido con la AP-51 (Ávila-Villacastín), que enlaza con la autovía A-50, entre Salamanca y Ávila.
Esta evolución positiva del uso de las autopistas contrasta con la reducción generalizada en las carreteras a causa de la crisis. De hecho, el volumen de tráfico por la principal autopista del noroeste, la AP-6 (Villalba-Adanero), descendió por segundo año consecutivo más de un cinco por ciento, aunque la tendencia a la baja fue menos acusada que en el conjunto de las carreteras de la red nacional. Así lo anunció ayer en San Rafael el director adjunto de Abertis Autopistas España, José Antonio López Casas, donde hizo balance de la actividad del grupo empresarial. “El año 2009 ha sido un año tristón, pues hemos bajado en la AP-6 un seis por ciento» lamentó.
Lo positivo para la empresa fue el incremento en la AP-51 y AP-6,1 gracias a la puesta en marcha de las otras vías rápidas como son la finalización de las obras de la autovía entre Ávila y Salamanca, y la entrada en servicio de la Autovía de Pinares (A-601) entre Valladolid y Segovia. “Son vías alternativas que contribuyen al uso del resto de las vías rápidas”, dijo López Casas.
En el tradicional encuentro navideño con los medios de comunicación segovianos y abulenses, López Casas presentó la nueva estructura del grupo Abertis, que gestiona más de 1.600 kilómetros en toda España. En total, los 16 millones de vehículos que utilizaron sus autopistas en el último año recorrieron más de 900 millones de kilómetros.
En la nueva organización empresarial se hará cargo de la Dirección de la Red Centro y Sur de Abertis Ignacio Arbilla, quien también se ocupará de la dirección de Explotación de las carreteras AP-6, AP-51 y AP-61. Juan Úbera es el nuevo gerente de estas tres carreteras, y María Teresa Bastida se responsabiliza de las Relaciones con los Clientes.
Peajes estables
Los usuarios de las autopistas no tendrán que soportar incrementos en el coste de los peajes, según indicó el director general adjunto de Abertis Autopistas debido a que el IPC ha sido negativo este año. Su aplicación tampoco supondría una rebaja pues al no ser de más de cinco céntimos se congelan las tasas. Tan sólo podría haber un ajuste por la modificación del IVA anunciado para mediados de 2010. En el caso de la AP-6 las tarifas se encuentran pendientes de la revisión del convenio por las obras previstas entre San Rafael y Villacastín.
López Casas sí lamentó que este año se produjera el accidente de tráfico más grave en las autopistas, con cuatro personas fallecidas el pasado mes de agosto, y que dijo que ha sido el más trágico de la historia de las autopistas.
Por último, José Antonio López Casas anunció que Iberpistas mantendrá su “compromiso con el territorio y con sus habitantes” de modo que continuará colaborando con los ayuntamientos de las zonas en las que opera, “a pesar de que los tiempos no sean los más idóneos”, dijo recordando las palabras del presidente de la compañía, Salvador Alemany.
