La sexta ola ha dejado gran cantidad de contagios en las residencias de mayores. Sin embargo, esta alta incidencia no ha provocado las graves cifras de muertes de anteriores olas.
Después de la tormenta llega la calma, y así las complicaciones derivadas de la sexta ola empiezan a remitir tras dos meses de ascensos.
Las cifras no engañan y los datos de usuarios con la enfermedad activa han tomado una clara tendencia descendente en los últimos días.
De esta forma, la Junta de Castilla y León remitió este martes que estos centros cuentan con 134 usuarios con la enfermedad covid-19 activa, una cifra que rebaja en 90 la obtenida por estos espacios el martes de la semana pasada.
Esta rebaja de los números viene propiciada por la sanación de muchos mayores, que han pasado a engrosar los datos de usuarios que han superado la infección. Además, esta caída muestra también la ralentización de los contagios, con muchos brotes ya extinguidos o controlados.
Aunque todavía la cifra de usuarios con la enfermedad activa es muy elevada, su descenso está siendo muy acusado y es posible que en varias semanas se pueda volver a extender la normalidad por la mayoría de centros.
Además de los contagiados activos, estos centros remiten a seis personas que se encuentran en situación de aislamiento.
Desde el inicio de la pandemia, estos espacios han registrado 448 fallecimientos relacionados con el coronavirus entre sus usuarios.
Sin duda, la mayor cifra de muertes se dio durante la primera ola, seguida de la tercera y la segunda. A partir de marzo del año pasado, con la llegada de la vacuna, los decesos por esta causa cayeron con estrépito.
Hasta ayer, los centros de mayores segovianos han remitido 1.498 positivos entre sus usuarios desde el inicio de la pandemia, de los que 1.364 han superado la enfermedad y 134 se mantienen con la enfermedad activa.
En cuanto a los últimos datos autonómicos, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades remitió este martes que se han producido nueve fallecidos respecto al dato del viernes (ninguno en Segovia), seis de ellos en hospitales y otros tres en los propios centros.
Con estos datos los fallecidos en las residencias con covid confirmado desde el inicio de la pandemia en Castilla y León se elevan a 3.167, de ellos 1.968 en los hospitales y 1.199 en los propios centros.
