La alcaldesa Clara Martín dijo este jueves que estará garantizado el acceso de los servicios de emergencia durante los 15 meses de ejecución de las obras en uno de los ejes turísticos de la ciudad, entre la Catedral y el Alcázar. La empresa adjudicataria Opyser está a la espera de la tramitación y aprobación de las direcciones facultativas para dar comienzo a finales de años los trabajos para los que ha propuesto no dejar tramos completos de manera prolongada sino de “seis en seis metros” e ir abriendo y cerrando.
Martín explicó que una vez licitadas las obras tienen que estar resueltas las direcciones facultativas de obra, de seguridad y salud y de arqueología. El concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras, Miguel Merino, tuvo una primera reunión con colectivos vecinales de Avras y del barrio de San Andrés, pero la alcaldesa afirmó que cuando se tenga todas las direcciones facultativas se llevará a cabo un gran encuentro con todas las entidades y vecinos afectados para ir dando recomendaciones y avisos.
La empresa propuso que, para garantizar siempre el acceso de servicios de emergencia como ambulancias y bomberos, se haga por tramos de seis metros. La alcaldesa señaló que “estas casas no tienen salida a otro punto”, en referencia a las calles Marques de Arco y Daoíz. La intención es empezar antes de finalizar el año. Se va a renovar la pavimentación para implementar un itinerario peatonal, así como la sustitución de las redes de abastecimiento y saneamiento y el soterramiento del cableado eléctrico.
Estas calles del centro histórico ya cuenta con la declaración de vía de Prioridad Peatonal, con acceso autorizado para residentes a sus garajes y vehículos autorizados. Las actuaciones que se van a acometer ahora son para su peatonalización, en el marco de los fondos europeos Next Generation concedidos al Ayuntamiento de Segovia en la primera convocatoria de ayudas a municipios para la implantación de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) y políticas de movilidad sostenible.
En concreto recibió 2.022.304,58 para tres acciones: 579.383,07 euros para la implantación y puesta en funcionamiento de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), que tiene que estar lista a 31 de diciembre de 2023 y será en recinto amurallado; la adecuación para su peatonalización del eje Catedral-Alcázar, formado por las calles Marqués del Arco y Daoíz, con 927.612 euros, y 515.308,92 euros para el carril bici.
En cuanto a la Zona de Bajas Emisiones, sostuvo Clara Martín, requiere también la redacción de una nueva ordenanza municipal de tráfico y otra ordenanza específica de ZBE, que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ya ha enviado un modelo ya que es obligatorio para todos.
