Luis Zarzuela González falleció a los 76 años de edad y recibió sepultura ayer en el cementerio de la localidad de la que fue alcalde durante cinco años. El actual y algunos ediles estuvieron presentes en el funeral, que se celebró a las 11 de la mañana en la iglesia de San Miguel. Multitud de vecinos acompañaron a la familia y allegados en la despedida a un hombre que impulsó la localidad en sus años de mandato.
Zarzuela fue elegido en las elecciones municipales de 1979; fue el primer candidato en la lista de Unión de Centro Democrático (UCD), y se convertiría así en el primer alcalde de Cuéllar de la democracia española. En sus años de gobierno realizó numerosas mejoras para la localidad y sus habitantes. Algunos de los proyectos que llevó a término fueron la Biblioteca Municipal ‘Cronista Herrera’, el CEIP ‘San Gil’ o la construcción de un centenar de viviendas de protección oficial en el barrio de Valdihuertos. También sacó adelante la fábrica de tableros ‘Alena’, que dio empleo a numerosos vecinos y, en consecuencia, potenció el nivel de vida en la localidad. Muchas de las infraestructuras con las que cuenta hoy el municipio y de las que se benefician sus ciudadanos se llevaron a cabo bajo el mandato de este alcalde.
Luis Zaruzuela relevó en el cargo a Modesto Fraile, y a él le sucedería Felipe Suárez en el año 83. Fue protagonista de algunos procesos polémicos, como el de la autonomía uniprovincial, que los vecinos recuerdan especialmente. Su decisión resultó trascendental y muy controvertida para los manifestantes que se desplazaron hasta Cuéllar para pedir tal autonomía. La manifestación impidió al alcalde y sus concejales salir del Consistorio tras el pleno en el que se rechazó la propuesta, y tuvieron que hacerlo varias horas después, escoltados por la Guardia Civil. Este fue uno de los acontecimientos de mayor relevancia en la memoria de los cuellaranos, pero recuerdan aún más todo lo que Zarzuela hizo por sus convecinos.
Dedicado al sector del mueble durante gran parte de su vida, lo compaginó con la política. Sus ocupaciones lo llevaron a relacionarse con multitud de personas de la comarca, las cuales también quisieron estar presentes en el sepelio.
