La coraza de líder invicto que empeñaba al Alhambra Unami hasta el momento consiguió noquearla la Universidad de Salamanca (USAL) al ganar en el feudo segoviano por 68-74. Partido serio e igualado en el que el cansancio acumulado tras el partido del sábado pasó factura y las salmantinas consiguieron llegar mejor al tramo final para llevarse el triunfo. A pesar de la primera derrota de la temporada, el conjunto de Alicia continúa regentando la primera posición.
No habían pasado ni 24 horas cuando el Unami y la Universidad de Salamanca volvieron a saltar a una cancha para disputar el encuentro aplazado correspondiente a la sexta jugada. Alonso, consciente de que el factor físico podía condicionar el transcurso del duelo optó por dosificar y rotar a sus componentes. La contienda comenzó de forma igualada y, aunque las locales desarrollaron un sistema más compacto, la rapidez en ataque de las salmantinas las permitió seguir el ritmo imprimido por las segovianas. El cuadro universitario enhebró sus acciones verticales a través de Varela, Vecino y Pedrosa, que fueron quienes llevaron la iniciativa de su equipo durante todo el duelo. Por parte del Alhambra, Esteve desempeñó un juego de peso en las labores de pívot para que el equipo vertebrase en creación. Con la equidad en el electrónico, un triple de Rollán y dos puntos de Guijo sobre la bocina fueron claves para sellar el primer cuarto en 21-19.
Se reanudó el choque y la tónica fue similar. Ninguno de los dos equipos quería ceder en sus pretensiones y los esquemas se mantuvieron constantes. Fernández y Rollán se dedicaron implementar la ventaja para el Alhambra con importante acierto, pero la holgura en determinados momentos de la defensa local permitió que las de Salamanca continuaran enganchadas al partido y se llegó al descanso con empate (42-42). Al final del tercer cuarto el resultado seguía siendo parejo (55-56), dejando en una incógnita el devenir del triunfo.
En los diez últimos minutos golpeó fuerte el plantel universitario y, cuando apenas habían pasado 90 segundos, logró ponerse 57-65. Esta situación obligó a Alonso a asentar conceptos en el respectivo tiempo muerto, pero el efecto fue inverso y el tino de las salmantinas las llevó a nutrir una ventaja de doce puntos. Pese a que Bacallado, Correa y Esteve impulsaron el ataque local, no salieron las cosas según lo estructurado y las visitantes lograron hacerse fuertes y manejar el tiempo restante para cobrar el triunfo por el resultado de 67-73.
