Hace apenas dos semanas, la Gimnástica Segoviana tocaba fondo en la temporada tras la fuerte derrota en su visita al campo de la Arandina, que dejaba al equipo muy tocado en el aspecto moral. Quince días más tarde, el conjunto azulgrana ha recuperado las sensaciones positivas, y encara el segundo tramo de la primera vuelta con la sensación de que nada se ha perdido, y que la permanencia en la Segunda División B es posible.
De dos semanas a esta parte, el equipo ha mejorado tanto en actitud sobre el terreno de juego, como en aptitud a la hora de igualar el nivel de los rivales. De esta manera, ante el Guijuelo de nuevo la Segoviana volvió a hacer méritos para ganar el encuentro, frente a la Arandina en la Copa Federación llegó la ansiada revancha del 5-0 liguero, y el pasado domingo, en la visita al campo del Zamora, el cuadro gimnástico estuvo muy cerca de llevarse la victoria, por más que en el tramo final del choque el equipo de casa marcara un tanto que dejó los tres puntos en sólo uno.
Sea como fuere, la Segoviana ya suma tres partidos sin conocer la derrota, y para consumar la reacción “sólo” necesita un triunfo que le acerque un poco más a las plazas de permanencia, de las que le separan seis puntos. Ahora llegan dos partidos en casa, ante el Eibar este domingo a partir de las cinco de la tarde, y frente al Amorebieta el próximo fin de semana, para rubricar una reacción que no le ha reportado demasiados puntos a la Segoviana, pero sí le ha hecho ganar en confianza en sus posibilidades. Que las tiene.