El inicio del año en el grupo octavo de la Tercera División dejó un escaso margen para la sorpresa, con resultados que pueden considerarse como “normales”, incluido el empate sin goles de la Arandina en el campo del Atlético Bembibre, que ha situado a la Segoviana a un solo punto de la tercera posición.
El conjunto azulgrana se mantiene en puestos de fase de ascenso, con dos puntos de diferencia sobre un Valladolid B que tras su victoria en el campo de El Hospital se ha convertido en la principal alternativa a los cuatro primeros clasificados, entre los que destaca un sólido Burgos, que no pierde un partido desde el 4 de noviembre en Palencia.
Por detrás del filial pucelano, el CD La Granja desciende a la séptima plaza y se queda a seis puntos del cuarto puesto. La derrota frente al Valladolid B no tiene más trascendencia, y el equipo ha de prepararse bien para sacar algo positivo del campo del Numancia B, un conjunto con el que los del Real Sitio han tenido alguna que otra desavenencia deportiva.
Quien no ha comenzado demasiado bien el año ha sido el Unami, que con su derrota en los anexos a El Helmántico frente al Salamanca B ha caído de nuevo en puestos de descenso, aunque a un solo punto de la permanencia que actualmente marca el Almazán. El que no termina de salir del pozo es el Cuéllar Eufón, que perdió en La Albuera, y se prepara para acometer unas jornadas importantes, con varios partidos en casa frente a rivales que también aspiran a la permanencia. Y todo ello, mientras la liga espera a que el Juzgado de lo Mercantil tome una decisión sobre el futuro del Palencia, que sigue jugando pese a que el administrador concursal anunció su liquidación.