Unos 150 profesionales de la medicina (médicos de atención primaria, ginecología, matronas, profesionales de enfermería, etc.) participan desde ayer en el III Congreso de la Sociedad Castellano-Leonesa de Contracepción (SCLC), que en su primera jornada ha dejado claro el apoyo de los profesionales agrupados en este colectivo a la actual legislación sobre interrupción voluntaria del embarazo, que rechazan las modificaciones propuestas por el Gobierno.
El doctor Modesto Rey, Presidente de la Sociedad Castellano-Leonesa de Contracepción, indicó que uno de los objetivos de la SCLC es facilitar los conocimientos «que acaben con falsas creencias y mitos, así como facilitar el desarrollo de los derechos sexuales y reproductivos como derechos humanos fundamentales definidos por la ONU en las conferencias de El Cairo y Pekín».
Para el doctor Rey, «la excusa de la crisis, el afán de protagonismo mediático del ministro de Justicia, la incompetencia de la ministra de Sanidad y el creciente protagonismo de los sectores más fundamentalistas de la jerarquía católica española conducen a despertar fantasmas que creíamos definitivamente enterrados».
Además, aseguró que se cuestionan «sin ninguna base científica, prácticas sanitarias como la libre dispensación de la píldora del día después», y señaló que la reforma de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo va a suponer «privar a las mujeres del derecho a decidir sobre su sexualidad y reproducción, judicializar unas prácticas que tienen que ver con la salud, condenar a las mujeres a soportar embarazos que pongan en riesgo de su salud y su vida o embarazos con fetos malformados para los que luego no hay recursos de apoyo y estímulo y condenar a las mujeres al turismo sanitario o a prácticas clandestinas con importantes riesgos para la salud».
En opinión del presidente de la SCLC, la actual Ley «no es una ley del aborto, habla de educación como necesidad para el libre ejercicio de la sexualidad y reproducción y responde a las demandas de nuestra sociedad siendo una ley socialmente aceptada que no debiera modificarse».
Perimenopausia
El salón de actos del Hospital acogió, a continuación, la inauguración oficial, coordinada por Ricardo Santamaría, Jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital General de Segovia y participando la Dra. Rosario Casado Vázquez, Presidenta del III Congreso de la SCLC, así como el presidente de la Sociedad Castellano-Leonesa de Contracepción. También intervinieron Juan Carlos Risueño, Gerente del Hospital General de Segovia y la concejala de Gobierno e Interior del Ayuntamiento de Segovia, María Luisa Delgado, representando al alcalde de la ciudad, así como la inauguración protocolaria que corrió a cargo de Carlos Francisco Sanz Moreno, Gerente de Salud de Área de Segovia, quien declaró inaugurado el Congreso.
La presidenta del Congreso, Rosario Casado recordó en su intervención que la actual situación económica «ha limitado notablemente la capacidad e impulso con que el emprendimos la tarea de organizar este encuentro, pero no por ello vamos a cejar en el empeño de mantener en el futuro nuestra labor». Con la elección de las necesidades contraceptivas en la perimenopausia como tema a debatir se busca «suscitar el interés entre los profesionales que cuidamos de la salud de las mujeres, en especial en esta etapa de su vida».
Según la doctora Casado, ginecóloga del Hospital General de Segovia, la población femenina de más de 40 años «es una población de riesgo de embarazo no deseado». Factores que condicionan estos embarazos son la falta de utilización de métodos anticonceptivos eficaces por temor a efectos secundarios, el uso inadecuado de los métodos de barrera y los riesgos debidos a patologías médicas y ginecológicas concomitantes.
Tras destacar los cambios hormonales, físicos, sociales y sicológicos previos a la menopausia señaló que pueden mermar la autoestima. Valoró, finalmente, la ideoneidad de una actitud positiva que ayudará a la adaptación a esta fase. «Esperamos que los contenidos de este Congreso ayuden a mejorar la asistencia a nuestras pacientes en un momento en el que es preciso un asesoramiento más específico».
