La salida en Galicia, los Pirineos, con la espectacular subida a la Collada de la Gallina, en Andorra, y la ascensión al mítico ‘picu’ asturiano de l’Angliru, con sus rampas de hasta el 23,5 por ciento que llegará en la víspera de la llegada a Madrid, son las principales novedades de la Vuelta ciclista a España de 2013.
Así lo anunció ayer el director general de la empresa organizadora, Unipublic, Javier Guillén, en la presentación oficial del recorrido de la 68 edición, que arrancará el 24 de agosto desde las Rías Baixas y concluirá el 15 de septiembre en la capital del país.
Con algo más de 3.300 kilómetros, la próxima ronda nacional tendrá seis etapas llanas, 13 de media y alta montaña y dos contrarrelojes, la inaugural por equipos y otra individual, de 38 kilómetros, en Tarazona (Zaragoza), con el Alto del Moncayo, de tercera categoría, en el ecuador de esa jornada de lucha contra el reloj.
La Vuelta a España, que sí dará un giro completo al mapa patrio atravesando el contorno de la ‘piel de toro’, excepto Murcia, Comunidad Valenciana y País Vasco, arrancará con una contrarreloj por equipos llana de 27 kilómetros en la que los ciclistas tendrán que viajar en barco para salir desde una batea de mejillones en la ría de Arousa.
Ésta será la primera de las cuatro jornadas que transcurrirán por tierras gallegas, entre ellas la de la subida al Alto do Monte da Groba, un ‘primera’ con algo más de 11 kilómetros con una pendiente media del 5,4 por ciento, final de la segunda etapa y la llegada a Fisterra, la ‘Etapa del fin del mundo’, después de coronarse el Alto del Mirador de Ezaro.
La ronda abandonará Galicia y atravesará la provincia de Zamora para llegar a Extremadura, tras siete años de ausencia, por Guijuelo, denominación de origen del famoso jamón ibérico, con salida en Almendralejo y que recorrerá Sevilla, antes de llegar a Mairena de Aljarafe.
La montaña será la protagonista en las tres jornadas siguientes, con la ascensión a los inéditos Alto de Peñas Blancas -16 kilómetros con 6,1 por ciento de desnivel medio y ‘picos’ del 16 por ciento- y Alto de Hazallanas, de categoría especial -6,5 kilómetros al 9,6 por ciento y tramos del 22 por ciento-, en la octava y décima etapa.
Además, el pelotón repetirá la estampa de hace un par de años en la que se verá a los corredores ‘trepar’ por la ‘pared’ del 30 por ciento en las calles de Valdepeñas de Jaén, donde se impuso ‘Purito’ Rodríguez en la edición de 2011.
Las etapas de Tarragona, sede de los Juegos Mediterráneos de 2017, y Castelldefels precederán a la primera etapa de los Pirineos, con meta en la Collada de la Gallina, hito en el que ganó Alejandro Valverde el pasado año, y al que se llegará tras ascenderse el Port de Envalira, de categoría especial, el Coll de Ordino y Port de la Comella, de primera y segunda.
La decimoquinta, entre Andorra y Peyragudes, será la ‘etapa maratón’, con 232,5 kilómetros, con el paso por los ‘primeras’ del Coll de Cantó, Port de la Bonaigua, Coll du Port de Balé y Peyresourde, un habitual del Tour de Francia y donde logró su último triunfo Valverde en la ronda francesa, a la que la Vuelta a España homenajeará por su centenario.
La última semana comenzará con la tercera y última etapa pirenaica con llegada en la estación de Formigal en Sallent de Gállego, en la tierra de uno de los mejores escaladores españoles, Fernando Escartín, previa a la segunda jornada de descanso.
Otra llegada habitual en los últimos años, Peña Cabarga, en la que se impusieron ‘Purito’ y el británico Chris Froome y la subida al Alto del Naranco serán el prólogo del final, por sexta vez -la última en 2011, con victoria de Cobo- en el Angliru, con su ‘Cueña les Cabres’ con el 23,5 por ciento, tan solo un día antes de llegar a Madrid.
Durante la presentación de la prueba, el vigente ganador de la Vuelta, Alberto Contador, afirmó que el recorrido de esta edición le «atrae», pese que su calendario de esta temporada girará alrededor del Tour .
Por su parte, el jefe de filas del Movistar Team, el murciano Alejandro Valverde, segundo en la carrera del pasado año, subrayó que la ronda de 2013 «es muy exigente, para escaladores».
