El día 19 de abril, una gran tormenta ocasionó desperfectos en el municipio, entre los que se encontró el del ascensor exterior situado en la calle Hojalatas, que facilita el acceso al Centro de Día de Personas Mayores; sin este servicio, el camino incluye medio centenar de escaleras o la empinada subida de la calle Modesto Fraile.
El coste de la avería asciende a una importante cantidad, según la empresa que ha realizado el informe, y con el que el Ayuntamiento tiene la intención de justificar que fue producido por una subida de tensión. La reparación concretamente consta de la sustitución de los variadores de frecuencia y la placa de maniobra.
El Ayuntamiento tiene un contrato de cesión de uso con la Gerencia Territorial de Servicios Sociales, la cual se responsabiliza del mantenimiento y reparación del ascensor durante un periodo de cuatro años. Hasta ahora, ninguna de las dos instituciones había intervenido, a la espera de que se presentara la reclamación oportuna por parte de la Secretaría del Ayuntamiento a la empresa suministradora de energía; los peritos debían evaluar los daños para solicitar la posible responsabilidad a la energética.
En el trascurso de la mañana de ayer lunes, el dilema sobre quién se haría cargo de la reparación del ascensor obtuvo por fin solución. La Gerencia Territorial de Servicios Sociales comunicó que se procedería a repararlo a través de la empresa encargada de su mantenimiento, Thyssen Krupp Elevadores, con independencia de las posibles responsabilidades que se están pidiendo a la suministradora de energía.
La gravedad del asunto está ocasionando muchas incomodidades a los usuarios, como afirma el responsable del Consejo del Centro de Mayores, Félix Arranz Sanz.
A pesar de la cesión de la Gerencia para el uso del ascensor por parte del centro, son muchas las familias y vecinos que también se benefician de él. Arranz ha trasladado el malestar que ha generado esta situación a todas las personas mayores y demás usuarios, y asegura que es un bien “necesario y fundamental”.
Ahora solo queda esperar a los informes que se emitan desde los Servicios Técnicos del Ayuntamiento de Cuéllar y la empresa de mantenimiento, para proceder a la total reparación del elevador y poner fin al problema que se lleva arrastrando desde abril.
