La Asociación de Amigos del Libro de Buen Amor se reunió ayer, con Juan Antonio Tapia a la cabeza, para informar de que este año no se celebrará la conocida fiesta de la romería del puerto de Malangosto debido a la resolución que impide el uso del fuego en esa zona. Esta romería nació con el espíritu de unir a los habitantes de ambos lados de la sierra, el segoviano valle de Lozoya y los pueblos serranos de la actual provincia de Segovia, y como señaló la asociación, no es una actividad turística ni recreativa, sino una actividad cultural.
La celebración habría de tener lugar mañana domingo, 4 de agosto, pero debido a su suspensión por “una interpretación particular y no un cambio de legislación”, como afirmó la asociación, la romería no se realizará porque no se puede cocinar el tradicional arroz campero, “que es lo más importante de la fiesta”.
La asociación señaló que esta situación no es consecuencia de la declaración de Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama hace apenas un mes, sino que defiende que ha sido causa del “responsable que ha decidido que la comida no podía realizarse”, como dijo Tapia. La asociación declaró que la normativa es la misma que el año pasado, cuando sí se celebró la comida en el ‘Chozo de la Chata’.
Los representantes de la asociación defienden que la romería del Malangosto recupera las tradiciones culturales de la sierra desde hace más de 45 años y que la ley que regula el uso del fuego y establece medidas preventivas para la lucha contra incendios forestales en Castilla y León dice que “en el caso de celebraciones y festejos tradicionales, se podrá autorizar el uso del fuego por la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León, teniéndose que cumplir las medidas de prevención y seguridad ante los riesgos de incendios”. Tapia justificó la romería alegando que desde hace 25 años se utiliza un anillo de gas butano para cocinar, con un camión cisterna con agua preparado por si hubiese algún problema. “Este año se ha negado la elaboración de la tradicional comida serrana por una interpretación particular de la romería como algo recreativo y no puntual como es este festejo”.
El presidente de la asociación también añadió que a partir del próximo 1 de septiembre, se reunirá con el delegado territorial, Javier López-Escobar, para resolver este tema “del todo” y que este tradicional evento, que lleva muchos años realizándose, no desaparezca para siempre y pueda volver a celebrarse en años posteriores.
historia Cuando Juan Ruiz, Arcipreste de Hita, escribió el ‘Libro de Buen Amor’ en el siglo XIV, la sierra de Guadarrama era una enorme muralla que separaba Madrid y Segovia. Ahora, más que separar, cada primer domingo de agosto, serranos de las dos vertientes suben a la romería del puerto de Malangosto, al paraje escrito en el ‘Libro del Buen Amor’ donde ‘la Chata’ paró al Arcipreste.
La romería de Malangosto nació pues con el espíritu de unir a los habitantes de ambos lados de la sierra. Es un acto de hermanamiento con un acto religioso, la eucaristía, y uno profano, la comida tradicional. Andando, en bicicleta, caballo o en coche, los romeros llegan al ‘Chozo de la Chata’, junto al nacimiento del río Cambrones. Tras la eucaristía, todos degustan el arroz campero.
De este modo, la romería es una recuperación de la cultura de la trashumancia por ser vía pecuaria de la Mesta, de la cultura literaria, del amor por la naturaleza y de la tradición histórica.
La Asociación de Amigos del Libro de Buen Amor expresó ayer que ellos recuperaron la tradición ancestral de los pastores trashumantes y gentes de ambos lados de la sierra de juntarse en el alto del pueblo. Tapia declaró que es un “rito que reiniciaron en 1969 y que este año queda interrumpido por una mala concepción de las tradiciones y la cultura”.
