La principal de las cinco mociones presentadas contra el ejecutivo de Netanyahu la defendió la líder de la oposición, la centrista Tzipi Livni, y fue rechazada por 59 de los diputados presentes, en tanto que 25 la apoyaron y 9 se abstuvieron.
«Tenemos fe en el Estado de Israel, en sus valores y en sus ciudadanos, pero el actual gobierno no representa a Israel», dijo Livni al presentar la moción en la Knesset (Parlamento), donde acusó a Netanyahu de llevar al país a un aislamiento sin precedentes.
«Lo que ocurre no es algo temporal. Se trata de un proceso continuo que está aislando a Israel del resto del mundo», aseguró la líder de la oposición, que consideró que «las actuales dificultades quizá supongan el momento más difícil de nuestra historia».
Livni advirtió que «el gobierno debe entender que hay que elegir entre un estado palestino de acuerdo a nuestra condiciones, o un Hamástan (en alusión al movimiento islamista Hamas, que gobierna en Gaza), que será el resultado de nuestro fracaso e inoperancia».
Tizpi Livni presentó la moción de censura después de que el asalto por el Ejercito de Israel a los siete barcos de esa flotilla internacional -que pretendía romper el bloqueo israelí y llevar ayuda humanitaria a Gaza-, causara la muerte de nueve activistas turcos en el único navío en que encontró resistencia.
La matanza ha provocado desde la semana pasada una masiva ola de protestas en la comunidad de naciones, y la ONU ha solicitado que la intervención militar israelí sea investigada por una comisión internacional, a lo que ayer se negó el Gobierno de Netanyahu.
Tras conocer a primera hora de la tarde la iniciativa de Livni, Netanyahu criticó a la líder de la oposición, a quien pidió «contención y responsabilidad», tras subrayar que «la próxima flotilla se vislumbra en el horizonte y lo que ahora necesitamos es plena confianza en el gobierno».
