Conchi Rios vino a Segovia acompañada por su actual pareja, el matador de toros José Manuel Más, ambos residentes en Navalcarnero donde entrenan y se preparan para afrontar una temporada muy decisoria en sus respectivas ambiciones. José Mauel ya toreó el pasado día 8 en Las Ventas y en cuanto a Conchi, lo hizo recientemente en dos festivales y tiene pendientes dos más antes de su alternativa.
“Yo estaba atravesando una excelente etapa en mis primeros años de novillera, desde el 8 de junio de 2009 cuando debuté con picadores en Granada. Ese año sumé siete novilladas y en el 2010 tuve momentos de verdadera importancia logrando triunfos en plazas de tanta resonancia como Barcelona, Bilbao, Granada, Sevilla, Castellón, Alicante y Murcia. Y ya en 2011 proseguí la buena racha sumando 20 novilladas con el éxito especial de Las Ventas donde salí en hombros tras cortar dos orejas a un novillo de José Cruz. Antes, había sufrido una cornada en Francia y llegué a Madrid el 10 de junio mermada de esa cornada, resíntiéndome pero aguantando el tipo hasta conseguir el triunfo reseñado”, resumió la novillera.
En su vida personal, Conchi Ríos estudia actualmente Psicología y participa en eventos como bailarina. Un dechado, un portento. Dejó asombrados a los presentes con manifestaciones tales, porque parece que puede resultar extraño la polivalencia de esta joven y guapa torera que tiene conceptos muy puros del toreo y que sabe desarrollar en los ruedos, compaginando la otra actividad artística y una carrera de difícil consecución. Emoció su relato sobre cómo se sobrepuso a la grave cogida de Francia.
“Mis tiempos inciales fueron de mucha expectativa. Logré galardones importantes como mejor novillera de la feria de Murcia, del certamen para jóvenes promesas del toreo de Puerto de Santa María, mejor novillera de Granada, Estepona, Blanca y Ricote. Todo parecía que rodaba bien y que el futuro se me presentaba diáfano y brillante, pero cuestiones administrativas y de una decisión de apoderados confundida, dieron al traste con los proyectos y las ilusiones”, relató. “Sufrí el grave percance de Francia y otro después en Madrid; y estaba preparándome para una alternativa acorde con mi buen momento Pero se habían firmado unas novilladas en plazas donde se lidiaba únicamente el novillo con kilos, pitones y años de sobra. Eso me descentró y poco después tomé la decisión de marcharme fuera de España”. “Estuve largo tiempo viviendo en Perú donde actué en varios festejos hasta mi regreso a España donde espero reanudar mi carrera con todos los pronunciamientos favorables”, añadió.
Conchi Ríos tomará la la alternativa el 9 de junio en Ceheguín de manos de Manuel Díez ‘El Cordobés’ con Antonio Puerta de testigo. “Como sabéis, me apodera Alberto García, también apoderado de Victor Barrio”, agregó.
El coloquio en el restaurante Patricia estuvo compartido por su novio, el matador de toros madrileño José Manuel Más, quien fuera novillero destacado hace tres o cuatro años y que ahora emprende nueva trayectoria en el máximo escalafón. «He toreado en la feria de San Isidro y mi apoderado, Javier Chopera, me tiene firmadas dos o tres corridas más y a la espera de que cuaje buenas tardes y pueda aumentar el número de festejos y éxitos. Fui alumno de la Escuela de Madrid y yo estaba muy bien considerado. Ya como novillero sin picadores logré en dos años sumar 86 novilladas. Ya con los montados, estuve tres temporadas ocupando uno de los tres primeros puestos del escalafón y en el año 2009 alcancé las 46 novilladas». Tomó la alternativa en Madrid acartelado por Diego Urdiales y Matías Tejela.
Sobre la presencia en esta tertulia taurina de mujeres toreras, se hizo mención a quienes ocuparon el sitial de invitadas especiales: las matadoras de toros Cristina Sánchez y Mari Paz Vega, las rejoneadoras Noelia Mota y Lea Vincent, un colectivo de socias de la peña taurina «Las Majas de Goya», formado por María Ángeles Sanz, ex de Paco Camino, Peñuca de la Serna, María Ángeles Grajal, mujer de Jaime Ostos y Ángela Rodríguez de Arce, ganadera de bravo y esposa que fue de Jumillano.
Como recuerdo del encuentro, la joven pareja recibió un óleo de Lope Tablada, un espléndido trabajo pictórico simbolizando a la bella y buena torera Conchi Rios en un muletazo de hechuras estéticas y mano baja, vestida con terno azul y oro.
