Entre la competencia feroz de pruebas populares de atletismo en Segovia, encontrar un puesto en el calendario es tan importante como el mismísimo recorrido. La Monumentrail, un híbrido de trail asequible con algunas características de carrera pedestre, ha sacado provecho de su adelanto. La prueba, que partirá esta tarde (19.00) de la Casa de la Moneda, ha pasado de octubre a mayo y su número de inscritos ha subido de 141 a más de 200 durante el día de ayer, un aumento cercano al cincuenta por ciento. “Este año ya sí se va a afianzar y se va a tomar como referencia en el calendario de carreras. La idea es que la prueba empiece a crecer a partir de ese posicionamiento”, aseguran los organizadores de cara a la segunda edición del evento, definido como familiar lejano de la Carrera Monumental.
El cambio responde a los hábitos del atleta. “Nos dimos cuenta de que el verano es un punto de inflexión porque la gente para y les cuesta volver a correr. En mayo estás metido en la vorágine del curso, la rutina de seguir entrenando”. Al recorrido principal, de 16,5 kilómetros, los organizadores han añadido otro más modesto, de 10 kilómetros con unos 500 metros de desnivel positivo acumulado, la mitad que el circuito grande. “Una carrera de 17 kilómetros está al alcance de menos personas que una de 10, así hay un abanico mayor de corredores que pueden participar», explican los organizadores. La cifra de inscritos en el circuito grande es superior a los datos del pequeño.
Salida y meta, mejor en el mismo punto
Aprendizaje de la primera edición, los organizadores han optado por situar la salida y la meta en el patio de la Casa de la Moneda. “Pensábamos que tenía más atractivo colocar salida y meta en lugares distintos, pero para el corredor es más cómodo que sea un único punto, y a nosotros nos facilita el montaje”. A la conclusión del evento habrá música en directo del grupo local Soul Rubbers.
Entre tantas pruebas de características homologables, sus organizadores definen a la Monumentrail por su trazado, dureza y entorno, concretados en un desafío entre lo agónico y lo estético. “No vas por caminos normales por donde solemos salir a correr. Son estrechos, veredas bonitas, subidas, bajadas, escaleras…” El propio recorrido plantea un techo para el crecimiento futuro de la prueba. “No queremos masificarlo, al final discurre por el medio naturales, y el límite puede ser 300 o 350 corredores para no erosionar el entorno”. El principal cliente del evento es el atleta de fuera. “En Segovia no estamos acostumbrados a participar en este tipo de carreras y queremos afianzar al público local, es una prueba para ellos”.
Una carrera en la víspera de una cita electoral
En la víspera de una cita electoral, los organizadores continúan con su rutina y mantienen el mismo protocolo de autoridades. “Al ser una prueba tan cercana hace que reine el nerviosismo para que todo salga perfecto, y desde el cuerpo técnico nos inciden especialmente en que no haya errores”.
