Las protestas contra delegaciones diplomáticas estadounidenses a causa de la controvertida película difamatoria con el Islam continuaron ayer en Egipto, iniciándose también en otros países de la región como Yemen, Irán, Túnez o la ciudad palestina de Gaza, dejando dos muertos y cientos de heridos.
Las nuevas manifestaciones e intentos de ataque se produjeron un día después de que el embajador estadounidense y otros tres diplomáticos perdiesen la vida en un asalto contra el consulado norteamericano de la ciudad libia de Bengasi, por el que las autoridades del país anunciaron ayer cuatro detenciones .
Así, en Yemen, dos manifestantes murieron y diez personas resultaron heridas en la capital, Saná, según informaron las autoridades del país.
Cientos de asaltantes escalaron el muro de la embajada norteamericana y reemplazaron la bandera oficial de barras y estrellas por una blanca en la que podía leerse: «No hay otro dios que Alá, y Mahoma es su profeta».
Según medios locales, el presidente yemení Abed Rabbo Mansur Hadi lamentó el brote de violencia y criticó la irresponsabilidad de los manifestantes.
En El Cairo, cientos de personas volvieron a congregarse ante la embajada de EEUU para protestar contra al cinta producida en éste país, de la que desde hace meses puede verse un trailer de 14 minutos de duración en YouTube.
Las protestas de la capital egipcia desembocaron en enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad. Según la televisión CNN, los asaltantes arrojaron piedras y los agentes lanzaron gases lacrimógenos y disparos de advertencia. De acuerdo a testigos y fuentes hospitalarias, en las protestas resultaron heridas más de 200 personas.
En Teherán, unas 500 personas se congregaron también ante la embajada de Suiza, que representa los intereses estadounidenses en el país, y reclamaron la muerte del director de la película.
Entretanto, en la ciudad palestina de Gaza, decenas de ciudadanos se manifestaron, quemando banderas israelíes y estadounidenses y proclamando consignas similares a las de los manifestantes de Teherán. También hubo protestas en Túnez, mientras que en la capital alemana, Berlín, un paquete sospechoso recibido por correo obligó a evacuar parcialmente el consulado de Estados Unidos, situado en el barrio de Dahlem.
LA MANO DE AL QAEDA
Por su parte, los servicios de seguridad de EEUU sospechan que tras esta violencia estaría la red terrorista Al Qaeda. Por ello, el presidente de la comisión de los servicios secretos ante la Cámara de Representantes, Mike Rogers, apuntó que podría tratarse de un ataque con motivo del undécimo aniversario de los atentados del 11-S.
Mientras, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, condenó la película y tachó la producción de «abominable».
