Está claro que el FC Barcelona no es el mismo de hace un par de años, aquel equipo de las seis copas que creaba magia en cada encuentro. Ahora, a los hombres de Pep Guardiola les cuesta mucho más encarrilar sus partidos y así se está demostrando en los primeros compases de la temporada. Algo así dejó ayer intuir el defensa ‘culé’ Eric Abidal, quien estimó que al conjunto le está faltando fortuna con el gol en este inicio de campeonato, pero no quiso encender las luces de alarma porque entiende que son «pequeños detalles» los que impiden una mayor eficacia goleadora.
«Hace dos años, el partido ante el Mallorca a los 20 minutos lo hubiésemos ido ganando por 4-0 creando las mismas ocasiones, porque la suerte que teníamos es que lo enchufábamos todo. Ésta es la suerte que nos está faltando esta temporada», argumentó.
Abidal comentó que el domingo, en la primera mitad, «el equipo hizo un trabajo casi perfecto», pero que faltó lo esencial: «Matar el encuentro marcando más goles para así poder jugar con más tranquilidad la segunda».
El lateral francés no sabe explicar por qué en este inicio de temporada el Barça está tan negado de cara a puerta, pese a crear infinidad de oportunidades: «El fútbol son muchos detalles, un centro demasiado fuerte, un jugador que llega un poco más tarde al remate. Lo hacemos muy bien durante los entrenamientos, jugamos muy bien durante los partidos, pero nos falta la suerte de marcar más».
Para Abidal, más preocupante que el poder realizador del equipo son los puntos que se están escapando del Camp Nou. «No me preocupa si marcamos muchos goles o no, porque lo importante es ganar y con 1-0 es suficiente», apuntó.
También le disgusta que al equipo le marquen, como el domingo, a balón parado -«un tanto a la salida de un córner es un gol que se puede evitar», se lamentó- y no quiso cargar contra el mal estado del césped: «No estamos aquí para buscar excusas y, si está mal, lo está para todos».
Sí restó importancia al hecho de que Bojan Krkic no se haya estrenado aún como goleador. «Bojan es delantero y, cuando no marca, se enfada, es lógico. Pero para eso estamos nosotros aquí, para ayudarle a que se desbloquee y pueda jugar más libre», señaló.
Por último, el lateral azulgrana valoró su ausencia en la convocatoria de la selección francesa. «No me duele no estar, es lógico. Durante 10 días ha habido cuatro partidos que yo no he jugado con el Barça (se fue a la Martinica a despedirse de su abuelo moribundo) y, si no juego aquí, es difícil hacerlo con la selección», concluyó.
