La titular del juzgado de Instrucción número 24 de Madrid, Mercedes Pérez Barrios, acordó ayer el sobreseimiento provisional y el archivo de las actuaciones relativas a la comisión de un supuesto delito de dopaje deportivo sobre la atleta Marta Domínguez y su agente José Alonso Valero.
El Tribunal Superior de Justicia (TSJM) confirmó que el archivo se refiere exclusivamente a este caso y que aún sigue abierta la investigación judicial sobre la palentina por la supuesta comisión de un delito fiscal y por haber suministrado, supuestamente y sin receta médica, y administrado un fármaco a una persona de su entorno, en concreto su compañero de entrenamientos Eduardo Polo.
El auto de la magistrada recuerda que las diligencias se iniciaron tras la entrega por parte de Marta Domínguez a su agente, José Alonso Valero, el pasado 17 de noviembre, de «una botella dorada» que éste a su vez entregó al atleta Alberto García, quien afirmó que contenía trembolona, una sustancia prohibida en el deporte.
Tras la intervención de «tres botellas de color marrón con tapón dorado intervenidas en el registro al domicilio de Alberto García» se procedió a hacer un análisis de su contenido en la Agencia Española de Medicamentos, y cuyo resultado concluyó «que dicha sustancia no es trembolona ni ningún derivado de la misma».
El auto, con fecha del 14 de abril, añade que tras el análisis realizado posteriormente «por la Agencia Estatal del dopaje confirmó que no ha sido hallado ninguno de los productos dopantes prohibidos en la reglamentación».
Según el TSJM, el sumario de la ‘Operación Galgo’, en el figuran también entre los imputados el médico Eufemiano Fuentes y los entrenadores Manuel Pascua y César Pérez, consta de aproximadamente 20.000 folios.
Nada más conocer la noticia, José Alonso Valero, agente de Marta Domínguez y también imputado, manifestó que «todos han ido a degüello, pero ya hablaremos cuando todo esté claro».
«Hemos tenido la santa paciencia de no abrir la boca pese a lo que se nos vino encima en su momento y vamos a seguir así hasta que todo esté aclarado. No he podido hablar con Marta, pero creo que coincidirá conmigo en hablar cuando corresponda».
Pese a no querer hacer comentario alguno del archivo de la causa, Alonso fue claro al mostrar su manera de sentir. «La actitud de los medios ha sido repugnante. Parece que se puso la carne cruda encima de la arena y que todo el mundo fue a degüello».
Por su parte, el abogado de la palentina, José Rodríguez, expresó su satisfacción por la decisión de la magistrado, aunque consideró que «se le ha hecho un daño irreparable» con su implicación en la ‘Operación Galgo’. «Se ha generado un poso de duda. Hay muchísima gente que está a su favor y otros que dudan».
