El frío está a la vuelta de la esquina y con su llegada y la del otoño y el invierno llegan también enfermedades típicas de la época como la gripe. Por ello, la Junta comenzó ayer a preparar la campaña de vacunación contra esta patología con la aprobación en el Consejo de Gobierno de una inversión de 2,6 millones de euros para la contratación del suministro de vacunas.
El objetivo es proteger a la población en general y ofertar cobertura suficiente a los grupos de riesgo frente a este virus. De esta manera, la Consejería de Sanidad quiere alcanzar o superar una cobertura de vacunación del 65% en el grupo de edad mayor o igual de 65 años y sobrepasar una cobertura del 30% en el grupo de profesionales sanitarios.
En concreto, Sanidad adquirirá por 1.144.000 euros 275.000 dosis de vacuna crecida en cultivos celulares y 330.000 vacunas antigripales con adyuvante por 1.475.760 euros. Según explicó la portavoz del Ejecutivo regional, Rosa Valdeón, a estos dos tipos de vacuna hay que añadir otros 91.000 euros para comprar 25.000 dosis de vacuna antigripal inactivada a partir de virus crecidos en huevos.
El primer tipo se destina a la población en general entre 18 y 70 años y, en particular, a la población mayor de 60 años, a grupos de riesgo con enfermedades respiratorias crónicas, cardiopoatías o patologías renales, a embarazadas, a personal sanitario, a profesionales de servicios públicos esenciales, a personas que puedan convertirse en transmisores involuntarios como personal de instituciones geriátricas o cuidadores a domicilio y a residentes en instituciones penitenciarias y centros tutelares de menores.
Por su parte, la vacuna con adyuvante es para la población mayor de 70 años ya que “se trata de una vacuna especialmente elaborada para mejorar la respuesta inmunológica frente al virus de las personas que normalmente la tienen baja”, precisó Valdeón.
Finalmente, la vacuna inactivada producida a partir de virus crecidos en huevos está destinada sobre todo a la población con edades comprendidas entre los seis meses y los 17 años.Por otra parte, el Gobierno regional aprobó una partida de 72,7 millones de euros que se destinarán a garantizar en 2016 la continuidad de la atención de las personas con discapacidad en residencias y en centros de día de actividad ocupacional, con el objetivo de garantizar su integración social.
El total invertido irá a parar a 330 centros de toda Castilla y León en los que se financiarán 7.161 plazas, de las cuales 1.992 son en centros residenciales, 732 en viviendas supervisadas y 4.437 en centros de día.
Estos conciertos facilitan, según la Junta, que las personas con discapacidad tengan la oportunidad de acceder a los servicios que más se adapten a sus necesidades vivan donde vivan.
