La fiesta en Fuentemilanos, en este caso en honor al patrón, Santiago Apóstol, se hace entre todos, y no porque el pueblo entero pueda disfrutar de las actividades programadas, sino porque son muchos los vecinos que colaboran y se involucran en la organización, en los preparativos, en la limpieza de después, etc. La de ayer fue una de esas jornadas de convivencia a la que están acostumbrados en este oficialmente llamado barrio incorporado de Segovia, con una paella a la que asistieron en torno a quinientos comensales.
La presidenta de la asociación de vecinos, María Cabrero, comenta a El Adelantado que las fiestas de Santiago se están celebrando, como siempre, con mucha participación. Empezaron el viernes con una cena popular, entre otros actos, a base de casi medio millar de bocadillos de panceta, que socios voluntarios se encargaron de comprar, preparar y distribuir. Cuenta Cabrero que al menos medio centenar de personas se involucra en los preparativos de la fiesta “porque como no hay muchos recursos económicos, lo tenemos que hacer prácticamente todo los vecinos”.
La jornada festiva del sábado se completó con encierros infantiles, hinchables para los más pequeños —hay cerca de un centenar de menores de 14 años asociados— y para las nueve de la tarde estaba prevista una cata de cerveza, antes de bailar al son de la discoteca móvil en cuyo descanso se iba a celebrar un bingo. La presidenta de la asociación dice que la afición por el bingo en Fuentemilanos es enorme, “estamos eviciados”, bromea.
La fiesta continúa hasta el lunes, festividad de Santiago.