L a plaza Mayor de Carbonero el Mayor se inundó ayer del colorido y del típico sabor senegalés, tanto en el aspecto gastronómico, como en el musical y artesanal. La novena edición de la Feria Intercultural de la localidad tenía este año como país invitado a Senegal, y con la colaboración de la Fundación Haiac (Fundación Hispano Africana para el Intercambio Artístico y Cultural), los segovianos tuvieron la oportunidad de conocer y disfrutar con los tradicionales productos del país africano, todo ello amenizado con la música y las danzas de los grupos Fatou Guewel & Group Sope Noyernisión y el Ballet Jammu.
A las doce del mediodía se inauguró la novena edición de la feria, y comenzaron a escucharse los tambores africanos, y a olerse el tradicional yassa, elaborado a base de arroz blanco cocido, con carne de pollo, ternera, patata y varias especias. También se puede preparar con pescado. Assa Ndiaye, senagalés residente en estos momentos en la provincia de Segovia, explicaba ayer que el yassa es uno de los platos más conocidos y fáciles de preparar de Senegal. Las numerosas personas que ayer se concentraron en Carbonero, animadas también por el buen tiempo, pudieron degustar el típico plato senagalés, acompañado de una bebida o té.
Assa Ndiaye afirma que le gusta mucho Segovia, y ya son unos 40 ciudadanos del país senegalés los que residen en la provincia, repartidos sobre todo por La Granja, Bernuy de Porreros y Torrecaballeros. “Nos parece muy bien la celebración de este tipo de eventos, porque así nos conocemos todos, y nos relacionamos entre diferentes culturas”, comentó.
Mientras, en el escenario instalado en la plaza, un grupo de músicos y danzantes, ataviados con sus trajes de fiesta, amenizaban la mañana con bailes en los que se representa el medio rural de Senegal.
Y como el objetivo de la feria es el intercambio de culturas, tampoco podían faltar los embutidos de Carbonero el Mayor, entre los que destacaba el jamón cortado por Isidro, que se repartió entre los asistentes junto al chorizo, chorizo blanco y lomo.
Alrededor de 20 artesanos de vidrio, jabones, bisutería, mimbre, cuero, cerrajería, joyería y cerámica llenaban, por otro lado, la plaza de Carbonero, en la que el trasiego de gente fue constante a lo largo de la jornada. Por la tarde se desarrolló un taller de percusión africana, en el que se utilizaron los tambores africanos.
Desde el Ayuntamiento de Carbonero el Mayor ya piensan en la edición del año que viene, en una clara apuesta por la promoción.
Integración.- La alcaldesa de Carbonero el Mayor, María Ángeles García, explicó que el objetivo de esta feria es la integración de los inmigrantes que residen en la localidad. “Las primeras ferias se dedicaron a países como Bulgaria, Polonia y Perú, que son los países que más inmigrantes aportan a la zona, para ver si disfrutando de las cultura y la gastronomía de esos países, nos podíamos conocer mejor”, apuntó. Este año ha sido Senegal el país invitado. “Nos pusimos en contacto con la embajada y con la Fundación Hayac, y nos pareció muy colorido el tema de Senegal; por eso están hoy aquí”, señaló la alcaldesa.
María Ángeles Sanz estuvo acompañada, entre otras autoridades, por el jefe del Servicio Territorial de Cultura, Juan José Martín; el diputado provincial de Cultura, José Carlos Monsalve; y alcaldes y concejales de localidades como Cantimpalos, Aldea Real y Santa María la Real de Nieva. La alcaldesa comentó que en Carbonero y la comarca hay bastante población inmigrante, “y, por eso, el motivo principal de esta feria es el de su integración y convivencia con los segovianos”.
Los vecinos de Carbonero el Mayor esperan con ganas todos los años su cita en el mes de octubre con la Feria Intercultural. “Muchas veces estamos muy cerca de los pueblos de alrededor, pero somos verdaderos desconocidos. Estas ferias ayudan a conocernos mejor”, concluyó la alcaldesa.
