La familia Ramos-Pavón donó al Ayuntamiento de Cuéllar las tres piezas cerámicas que custodiaban en su farmacia segoviana, procedentes de la antigua botica que tuvo el monasterio de San Francisco de Cuéllar. Se trata de tres tarros, concretamente una orza y dos albarelos de diferentes tamaños, realizados en cerámica de Talavera y datan del siglo XVIII.
El Ayuntamiento de la villa los tenía localizados en dicha farmacia y catalogados en el inventario del patrimonio cuellarano que se encuentran fuera de la villa, con la ficha 041. El documento de donación fue firmado en la mañana de ayer por la familia, en la sala de Comisiones del Ayuntamiento, en presencia del alcalde y del secretario.
Las piezas pasarán a formar parte de la colección relacionada con el Monasterio que la Concejalía de Turismo ha instalado en la Sala de los Escudos del Castillo. Esta colección alberga algunos fragmentos de los sepulcros de alabastro del panteón familiar de los duques; y también se pueden observar azulejos de Talavera y yeserías, así como algunas fotografías del complejo monacal cuando aún se encontraba en pie.
La Concejalía de Turismo está trabajando por la recuperación y localización de objetos, piezas y obras pertenecientes a la localidad y que, por lances de la historia, fueron expoliados o trasladados .
Es reciente el caso de un órgano del siglo XIX del Santuario de El Henar que fue ubicado en Banyeres de Mariola, Alicante. La comisión del municipio alicantino inició un proyecto de colaboración a nivel sociocultural y de acercamiento de municipios para fomentar el turismo entre las dos localidades.
Con esta donación por parte de la familia Ramos-Pavón, vinculada a la villa, se recupera un pedazo más de la rica historia de Cuéllar, que a pesar de encontrarse disperso, está perfectamente listado en el inventario de patrimonio local.
