Los colegios de los pueblos de Sacramenia, Abades y Olombrada perderán el próximo curso los estudios del primer ciclo de Educación Secundaria Obligatoria. La oferta excepcional denominada ESO Rural se mantendrá en Riaza, Cantimpalos, Turégano y Navas de Oro. La continuidad en Vallelado está en estos momentos en proceso de análisis por los responsables de Educación, si bien hay indicios que anuncian su posible permanencia en el pueblo al menos el próximo curso.
Las declaraciones realizadas por el consejero de Educación, Juan José Mateos, en mayo en las Cortes regionales anunciado la reducción progresiva de los grupos de ESO que permanecen en los centros de Educación Infantil y Primaria del ámbito rural, generó la preocupación y el desconcierto entre los habitantes de los pueblos. Además puso en marcha la maquinaria de las direcciones provinciales para revisar la implantación de este modelo ambiguo y los grupos con una ratio inferior a diez niños. Las opciones que maneja la Consejería pasan por la desaparición del primer ciclo de Secundaria y el traslado de los niños a un instituto, en el caso de que cada uno de los grupos no llegue a 10 alumnos; la posibilidad de fusionarse primero y segundo de ESO, cuando sumen entre ambos al menos 14 alumnos; o bien mantenerse al cumplir o superar la ratio.
Según han explicado distintas fuentes del ámbito educativo a esta redacción, la extinción de la ESO Rural en el CEIP La Chopera de Sacramenia y en el colegio de Abades, del CRA Los Llanos, se ha producido “de forma natural”, por la desaparición de alumnos y la decisión de los padres de matricular a los que quedaban en un instituto. Olombrada es el primer lugar donde la medida de la Junta ha hecho mella, con solo nueve alumnos en los dos grupos del primer ciclo de ESO se ha visto empujado a perder la oferta. Tanto en Olombrada como en Vallelado, que son los casos intermedios en cuanto a números de alumnos, se han sucedido las reuniones de responsables de la Dirección Provincial de Educación con representantes municipales, educativos y padres de alumnos en las últimas semanas. La decisión en el caso de Vallelado no está cerrada y, aunque en principio estaba amenazada la permanencia, distintas fuentes apuntan ahora a que podría salvarse el próximo año con dieciséis alumnos entre los dos grupos. El tema será abordado en una reunión que se celebrará en la Consejería de Educación en los próximos días.
Los otros cuatro pueblos que tienen el primer ciclo de la Secundaria en los colegios tienen dos grupos de alumnos, uno por curso, y garantizada su continuidad el próximo año.
El director provincial de Educación, Antonio Rodríguez Belloso, ha precisado que la decisión de reducir los grupos de ESO obedece a criterios pedagógicos y no económicos. Recuerdan que los alumnos que hacen la Secundaria en los colegios reciben 177 horas menos de clase al curso que los que acuden a institutos; carecen de las instalaciones propias de un centro de Secundaria, como laboratorios, y de profesorado especialista en las distintas materias.
Por su parte, la Confederación de Federaciones de Ampas rurales (Confarcale) ha pedido a la Junta que mantenga durante el próximo curso el esquema existente y aproveche este periodo para analizar caso por caso la implantación y futuro de los estudios del primer ciclo de Educación Secundaria en los colegios. La confederación recuerda que en Castilla y León hay 110 centros de Primaria con ESO y el “80 por ciento está amenazado por la medida de la Consejería”.
