Aunque la figura de Palenzuela será recordada a lo largo de la historia por su trabajo a favor de la diócesis a la que sirvió durante un cuarto de siglo, su legado más tangible permanecerá como patrimonio diocesano gracias a la generosidad de la familia del obispo segoviano, que ha donado a la Iglesia segoviana los cerca de 8.000 volúmenes de su biblioteca personal, que constituyen un verdadero tesoro que incrementa el ya de por si valioso patrimonio diocesano.
Filosofía, Historia, Derecho Canónico, Teología, Historia del Arte, Economía y autores clásicos son algunos de los temas que a lo largo de su vida fueron estudiados, analizados y aprendidos por Palenzuela a través de los libros, que ahora han sido ordenados y catalogados para su uso por el canónigo de la Catedral de Segovia Angel García, y que inicialmente se conservarán en una pequeña sala de la Casa de Espiritualidad «San Frutos», aneja al edificio del Seminario.
García señaló ayer la dificultad que supuso poder ordenar y clasificar tan vasto volumen de libros, cuyas materias «hablan por si mismas de la calidad intelectual de un hombre excepcional que fue autor de libros y lector y estudioso de otros».
En este sentido, indicó que la biblioteca hace posible comprender la inquietud intelectual de Palenzuela por todas las áreas del saber humano, que le llevaron incluso al análisis de las costumbres locales de su diócesis o incluso a buscar publicaciones que le llevaron a investigar sobre su origen genealógico.
Además de los libros, la biblioteca permitirá consultar y analizar los documentos, estudios e informes elaborados en su etapa como presidente de la comisión para la Doctrina de la Fe en la Conferencia Episcopal, así como su vasta experiencia como articulista y ensayista en revistas y publicaciones periódicas.
La sala que alberga la biblioteca en la actualidad tiene carácter provisional, ya que en breve será trasladada a un espacio más grande en el sótano de la Casa de Espiritualidad con el fin de que pueda ser consultada y utilizada en las mejores condiciones.
La biblioteca que llevará el nombre de Antonio Palenzuela recordará también su imagen a través de un busto en madera policromada realizado por la artista Merisel López, que ayer pudo verse por primera vez.