La auditoría energética encargada por el Ayuntamiento propone la sustitución de 1.744 lámparas por otras con tecnología LED y regulación electrónica y la adaptación de 423 lámparas de descarga a niveles de iluminación acordes con la normativa vigente. Este documento encargado a la empresa ‘Creara’ de Madrid, especialista en eficiencia y ahorro energético, propone también la instalación de un sistema de telegestión y las actuaciones en los centros de mando. Así la auditoría incide sobre el cumplimiento de la normativa vigente de eficiencia energética y propone una modernización del sistema de iluminación actuando sobre los centros de mando y sistemas de encendido: en la actualidad existen en Cuéllar 39 cuadros de control de los cuales 8 necesitan de una renovación profunda. El otro aspecto importante está encaminado a la mejora de los niveles de iluminación y las lámparas instaladas. Actualmente las calles de la villa están iluminadas por 2.298 lámparas de 12 grupos diferentes que en un 75 por ciento se pueden considerar ineficientes desde el punto de vista del rendimiento óptico.
El edil de Patrimonio, Luis Senovilla, señala que la reducción de la factura en alumbrado público es estos momentos es de unos 200.000 euros al año, no ha sido la única razón para llevar a cabo esta auditoría con la que también se pretendía “conocer la situación del alumbrado público y las medidas necesarias que debe adoptar el Ayuntamiento para optimizar la demanda y fomentar el ahorro energético, crear un ambiente sociable por medio de la mejora del color y uniformidad en la iluminación y una huella ecológica reducida que contribuya al desarrollo sostenible de Cuéllar”.
La auditoría ha realizado una evaluación técnica de cada instalación y un diagnóstico de las principales deficiencias, proponiendo actuaciones en las mismas para disminuir el consumo sin perjuicio de los parámetros de calidad y servicio, y valora la viabilidad técnica y económica de cada propuesta de actuación.
La implantación conjunta de las propuestas permitiría un ahorro energético del 57 por ciento sobre el consumo actual de la instalación de alumbrado público y una reducción de emisiones de CO2 de 271.239 kilos, pasando la calificación energética de la actual D a A.
El Ayuntamiento aún no ha decidido la fórmula para poner en marcha la sustitución de las luminarias. Actualmente está recabando información de otras instituciones públicas y privadas para conocer sus modificaciones a la auditoría y propuestas para una posible licitación.
