En las conclusiones de este encuentro, José Luis Poveda, Presidente de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria, Jefe de Servicio del Hospital La Fé de Valencia y miembro del Comité Científico de estas jornadas, explicó que el farmacéutico de hospital influye significativamente en la calidad del servicio que recibe el paciente. Tiene la misión de aumentar la efectividad de los tratamientos en base al proceso de selección que se hace de los mismos, mejorando la seguridad.
«Disponemos de un sistema de distribución lo más racional posible y lo más individualizado, que permite garantizar que los tratamientos prescritos van a ser administrados al paciente a la hora indicada, a la dosis adecuada y por la vía de administración correcta. Se trata de que mejoremos el proceso fármaco-terapéutico y la calidad que reciben los pacientes a base de la cartera de servicios que desarrollamos», explica el Dr. Poveda.
Los servicios de farmacia han participado activamente en el desarrollo de herramientas que mejoran la eficacia de los medicamentos. Mediante las comisiones de farmacia se hace un proceso de selección de aquellos medicamentos que obtienen los mejores resultados con el mínimo coste.
Los farmacéuticos de hospital manejan un tanto por ciento considerable del presupuesto global. Este porcentaje es muy variable dependiendo del tamaño del hospital, de si es un hospital de referencia o del tipo de patologías que se trate, entre otras cuestiones.
El doctor Poveda matiza que «en un hospital medio de entre 500 y 700 camas un farmacéutico de hospital maneja aproximadamente entre el 12% y el 15 del total del presupuesto del mismo. Si se trata de un hospital de referencia podemos llegar al 17%. Aproximadamente el 70% son gastos de recursos humanos».