La asamblea de la agrupación local socialista de Segovia capital en la que se elegirá a la nueva ejecutiva tendrá lugar o el viernes 15 o el viernes 22 de febrero, según adelantaron fuentes socialistas. De acuerdo con estas fuentes, la asamblea debe convocarse legalmente con cinco días de antelación, y tradicionalmente suelen celebrarse en viernes, porque es el día que propicia una mayor asistencia de afiliados.
Así las cosas, y dentro de la intención del PSOE de desarrollar la asamblea lo antes posible, el primer viernes en que podría celebrarse sería el 15 de febrero; la otra opción es el viernes 22, ya que el siguiente ya es el día 1 de marzo, y el partido no quiere que este proceso se prolongue más allá de febrero.
Según confirmaron las mismas fuentes socialistas, hasta el momento ninguno de los cerca de 150 afiliados con que cuenta la agrupación local de la capital ha manifestado su intención se presentar su candidatura, lo que permite acceder al censo y así poder enviar una carta u otro tipo de comunicación a los electores. No obstante, la posibilidad de presentar una lista para la ejecutiva permanece abierta hasta la misma asamblea, por lo que las sorpresas son posibles hasta última hora.
Como se recordará, el hasta ahora secretario general de la agrupación, el concejal en el Ayuntamiento de la capital Alfonso Reguera, presentaba su dimisión hace unos días, forzando un nuevo proceso electoral, solo siete meses después del anterior. Entonces, en junio, concurrieron dos aspirantes, el propio Reguera y el también concejal de Segovia Javier Arranz. El empate a votos entre ambos se solucionó, al menos en teoría, con el nombramiento de Reguera como secretario general y el de Arranz como presidente, un cargo meramente representativo.
El malestar entre las corrientes que ambos representan se hizo evidente con la reprimenda que públicamente, a través de una nota de prensa, con membrete del partido, le dio Reguera a Arranz por el enfrentamiento que este último mantuvo en Facebook con otro concejal del Ayuntamiento de la capital, el popular Juan Antonio Folgado. Días después, Reguera presentaba la dimisión, terminando con el breve periodo de equilibrio precario de los últimos meses, y abriendo un nuevo proceso electoral.
