El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, anunció hoy el propósito del Gobierno municipal (PSOE) de iniciar a lo largo de 2010 la tramitación del proyecto de recrecida del embalse de Puente Alta, ubicado en Revenga, con el fin de dar una solución definitiva a los problemas de abastecimiento que sufre la capital en periodo estival y atender la demanda asociada al futuro desarrollo de la ciudad y los núcleos del alfoz, en la perspectiva de que la ciudad pueda crecer hasta los 80.000 habitantes en el horizonte de una década.
Arahuetes, acompañado por el concejal de Obras, José Llorente, y el ingeniero jefe municipal, Emilio García, presentó esta mañana el estudio para ampliar el abastecimiento de agua a Segovia y su alfoz redactado por la empresa Incisa y en el que figura como actuación más importante la recrecida del embalse de Puente Alta, construído en 1953 y de titularidad municipal.
El estudio baraja tres alternativas para ampliar el embalse aguas abajo. Las tres se basan en la construcción de un nuevo dique de unos 200 metros aguas abajo y a una altura de algo más de tres metros por encima de la cota que alcanza el actual pantano, que quedaría sumergido. Arahuetes explicó que las tres alternativas proponen volúmenes similares de agua, aunque el coste económico varía en función de cómo se incorpore la carretera N-603 (Segovia-San Rafael) en el proyecto.
El alcalde explicó que la opción elegida supone la recrecida de la presa de Puente Alta hasta alcanzar un volumen de embalse de 6 hectómetros cúbicos, con una altura de muro de 55 metros (por los 51 del actual) y el trazado de la variante de la carretera sobre coronación; esto es, la propuesta elegida es la que contempla situar la carretera en el muro de la presa, descartando la construcción de un viaducto paralelo.
El coste de construcción de la presa y de una central de turbinado a pie del embalse para la producción de energía aprovechando el salto de agua, de la que podrían beneficiarse unas 2.000 personas, ascendería a 18,7 millones de euros.
Junto a la recrecida de la presa de Revenga, el plan contempla la ampliación de las conducciones entre el embalse y Segovia así como la adaptación de la potabilizadora del Rancho del Feo para que sea capaz de suministrar a más población. También se prevé la construcción de una estación de bombeo en el pantano del Pontón para llevar el agua hasta el Rancho del Feo si fuera necesario durante los meses de verano. Arahuetes explicó que con estas actuaciones complementarias a la recrecida de la presa, el presupuesto total alcanza los 32 millones de euros.
El alcalde manifestó su confianza en alcanzar un acuerdo “a cuatro bandas”, entre los ministerios de Fomento y Medio Ambiente, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento para financiar la construcción de una infraestructura que es “imprescindible” para Segovia.