En una provincia tradicionalmente de servicios como Segovia, llama la atención que sectores como la agricultura y la industria ganan peso en el mercado de trabajo, en detrimento tanto de los servicios como de la construcción, según muestra la EPA del último trimestre de 2013.
En primer lugar hay que advertir que la población que se declara activa en la citada encuesta —la que durante el periodo en la que se realizó tenía 16 o más años y estaba trabajando o en disposición de trabajar— corresponde a 78.700 residentes en la provincia, lo que indica 5.400 menos que en 2008, antes de que se empezara a destruir empleo en la provincia de Segovia. Sin embargo, son 700 más que un año antes; es decir, que en el cuarto trimestre de 2012.
Dentro de esa población activa, el colectivo más numeroso es el que se declara perteneciente al sector servicios, equivalente a 47.400 residentes en Segovia, 3.100 menos que un año antes pero en niveles similares al año 2008. El sector servicios alcanzó la cifra de población activa más elevada en la provincia durante el cuarto trimestre de 2010, cuando ascendió 51.300 personas.
En el sector agrario la población activa era a finales del año pasado de 9.200 personas, todo un récord al que solo se acercó la prospección de la EPA del cuarto trimestre de 2008. Por ejemplo, en el cuarto trimestre de 2010 no alcanzaba la cifra de 5.000 personas.
La construcción, el sector más castigado por la recesión económica, junto a los servicios, ha pasado de una población activa de 13.700 personas en el tercer trimestre de 2008 a 4.800, según la última encuesta elaborada por el INE, la cifra más baja de la historia de la EPA en la provincia.
También la industria indica un importante descenso en relación con los datos del primer trimestre de 2009, cuando la población a activa en este sector llegó a ser de 15.100 personas. Los últimos datos señalan que ronda los 9.300, aunque supone una recuperación en relación con la situación de un año antes, ya que en el cuarto trimestre de 2012 no llegaba a los 7.000.
Así las cosas, la última EPA muestra que agricultura e industria se acercan, cada sector, al 12 por ciento de la población activa de la provincia, porcentaje nunca antes alcanzado, mientras la construcción cae hasta el 6 por ciento y los servicios en torno al 60 por ciento. El 10 por ciento restante corresponde a los parados que buscan su primer empleo o han dejado su último empleo hace más de un año.
El porcentaje es todavía más alto en la población ocupada de la provincia, donde agricultura e industria superan el 13 por ciento del total de la población ocupada, según la última encuesta de población activa.
Si bien la tasa provincial de paro ha sido en el cuarto trimestre del 17,52 por ciento de la población activa, hay diferencias significativas entre el paro masculino, con una tasa de desempleo del 15,30, una de las dos más bajas de España (sólo es inferior en Soria), y el paro femenino, donde la tasa supera el 20 por ciento.
En cualquier caso, aunque la tasa de paro de la provincia, del 17,52 por ciento, es también una de las más bajas de España (superior únicamente a la de Soria, Lérida, Navarra y las tres provincias vascas), casi triplica la existente en el año 2007, lo que indica que ha seguido una evolución negativa similar a la del conjunto de España, donde ha pasado de 8,60 en 2007 a 26,03 el año pasado.
