En junio de 2015, la Academia de Artillería volverá a dar un paso más en la historia al poner en marcha el nuevo Simulador de Artillería de Campaña (SIMACA), mediante la incorporación de un sistema informático más versátil y adaptado a los nuevos escenarios de acción de las distinas unidades artilleras. El general director del centro de enseñanza militar, Alfredo Sanz y Calabria, dio a conocer ayer algunas de las características del nuevo SIMACA en su comparecencia ante los medios de comunicación para presentar el balance de las actividades desarrolladas con ocasión del 250 aniversario del Real Colegio de Artillería, así como las previsiones de futuro para el recién estrenado año.
El general Sanz y Calabria recordó que desde su implantación en el centro en 2001, el SIMACA ha sido referencia obligada en la formación de todas las unidades de artillería de España, así como ejemplo para muchos otros ejércitos internacionales que han visto en el simulador de Segovia una posibilidad para mejorar la formación de sus artilleros. A todo esto, hay que añadir el considerable ahorro que la formación virtual permite a las Fuerzas Armadas, ya que evita costosos desplazamientos hasta los polígonos de tiro habilitados a tal fin, así como un «inevitable» impacto medioambiental, según explicó Sanz y Calabria. Como ejemplo, en 2009 el trabajo en los simuladores de la Academia de Artillería -SIMACA y los de artillería antiaérea del cañón 35/90 y el misil «Mistral»- permitió realizar más de 300.000 disparos en los distintos ejercicios planteados en el adiestramiento de las unidades, con un ahorro estimado en 200 millones de euros.
El avance de las nuevas tecnologías y la modificación de los distintos escenarios en los que intervienen las Fuerzas Armadas ha hecho que el simulador se encuentre en la actualidad «al límite de sus posibiliddes», tal y como reconoció el general director de la Academia de Artillería, por lo que ha sido necesario emprender una «profunda renovación». Así, a los escenarios simulados del Líbano o Afganistán que ofrecía ya el SIMACA, la incorporación de un nuevo software permtirá añadir nuevos entornos urbanos o periurbanos en los que, según aseguró el general «será donde previsiblemente se producirán los conflictos en el futuro».
Además de la recreación de nuevos escenarios, el simulador será dotado del sistema Virtual Battle System 3.0, más potente en el tratamiento de imágenes, y a la vez, compatible con el de otros centros de formación militar.
Esta compatibilidad permitirá al simulador aprovechar la posibilidad de comunicarse con otros centros para poder llevar a cabo ejercicios combinados que mejorarán sensiblemente la formación de las Fuerzas Armadas en el ámbito de la artillería. Así los ejercicios virtuales permitirán en un futuro compartir formación con la Armada o el Ejército del Aire «sin necesidad de movilizar medios reales», precisó el general director. «Hemos conseguido que el sistema pase de ser centralizado a distribuído —explicó—, lo que nos permite ganar mayor operatividad”.
El proyecto de renovación del sistema seguirá siendo abanderado por tecnología española, ya que será la empresa Tecnobit la encargada de su desarrollo, que comenzó a trabajar en octubre de 2014 y que prevé entregar el nuevo producto a finales de junio.
