Cuenta Juan Hedo que el concierto que ofrecerá el próximo martes, día 15, a las 22 horas en el adarve de la Puerta de San Andrés de Segovia, es el tercero que protagoniza en este espacio tan singular, después de los de 2014 y 2019. Y recalca que siente mucha debilidad por este lugar: “Es un sitio muy hermoso. Se divisa el Pinarillo, el Alcázar, la Sierra de Guadarrama… Sitios que he evocado en mi obra poética. Un sitio hermoso para cantar”.
Porque este cantante y poeta —su último trabajo literario es ‘Elegías de un beduino’— ha planteado la actuación “como algo experimental, íntimo, porque el sitio se presta a eso” y señala la cercanía con el público, “como en un tablao flamenco”.
El concierto forma parte del ciclo ‘Los Martes de la Muralla’ que organiza Turismo de Segovia, donde advierten que Hedo se gana al público relatando toda su mundología pero que nadie se engañe porque es un gran cantante, con una hermosa voz y un gusto exquisito.
El programa online del concierto no engaña: “su labor creativa es siempre un acto de amor y sensualidad. Profundiza en su fondo humano, busca una vida mejor y lo trasmite. Sus canciones están basadas y arraigadas en la canción clásica y la canción popular donde predomina una bella melodía y unas letras de tradición poético-narrativas. Todo conforma una unión emotiva, servido por una voz vibrante, clara y de timbre mediterráneo. Reivindica la libertad y la fuerza de la canción. Un artista que encarna, ciertamente, un retorno a la forma romántica de la creación”.
Acompañado de su guitarra y del cebrereño Adolfo Díaz al laúd, un músico de 83 años con quien se siente muy a gusto Hedo, porque lleva con él desde 2005 y juntos han recorrido toda la península, adelanta que el repertorio estará formado por algunas canciones de sus dos últimos discos, ‘Coplas de la montaña’ y ‘Destino pampeño’, ambos grabados y producidos en León por el gran productor e ingeniero de sonido Pablo Vega, e incluirá otros temas suyos como ‘La plaza del 2 de mayo’, una de sus canciones más hermosas, uno dedicado a Segovia, ‘Pincelada azul’, algo de canción francesa y algo de folclore argentino y temas instrumentales, cuenta el artista.
Precisamente, Hedo está pasando el verano en León, con veladas amenizadas en el claustro de la Real Colegiata de San Isidoro de la mano del Hotel Real Real Colegiata.
Eso no le ha impedido ofrecer este mes de agosto algún concierto en la provincia, como el que del viernes 4 en Olombrada, del que guarda un buen recuerdo porque la noche era desapacible y finalmente la actuación se llevó a cabo “en un teatrillo; y cuando es en el interior la gente se dispersa menos”. Fuera de Segovia, próximamente presentará su música en Ezcaray (La Rioja).
De Adolfo Díaz, su compañero musical este martes, habla maravillas. “Es un virtuoso con el laúd, que es un instrumento que me gusta muchísimo”. Junto a su guitarra y su voz, tiene los ingredientes necesarios para conseguir su objetivo, que sea “un concierto bonito, entrañable y con gusto, que deje buen sabor y un poquito de chispa, de luz verdadera, que estamos faltos de ella”.
