Sostiene una creencia popular, extendida por toda la provincia de Segovia, que si durante la procesión con la Virgen de las Candelas no se apaga la vela que la imagen lleva en su mano, el año será de buenas cosechas… Sea o no sea cierto, ayer, en Hontoria, la Virgen de las Candelas hizo casi toda la procesión con la vela apagada…
Una de las fiestas más arraigadas de invierno es, sin duda, la de Las Candelas, que se celebra el 2 de febrero —aunque algunas localidades hayan decidido su traslado al fin de semana más próximo— en conmemoración de la presentación del Niño Jesús en el templo, 40 días después de que la Virgen María hubiera dado a luz. En aquel acto, San José y la Virgen ofrecieron en sacrificio un par de pichones (San Lucas 2, 22-24), un rito que hoy se sigue manteniendo en la festividad. María Luisa Martín, la “madrina” de 2018 en Hontoria, realizó ayer la procesión con una cesta en la que iban dos pichones, agazapados. “Estoy muy ilusionada con mi papel, pues sigo una tradición familiar en la que participaron mi abuela y mi madre”, señalaba Martín, recordando que para el nombramiento de “madrina” se recurre a una vieja lista donde se inscribía a las mujeres del lugar.
En Hontoria, ayer hubo misa matutina, y rosario y procesión vespertina. En esta última, el momento de más espectacularidad de la función, la Virgen de las Candelas fue custodiada, como manda la costumbre, por cuatro ‘alabarderas’, portando cada una sus ancestrales defensas, talladas en el siglo XVIII. Junto a ellas, la que fue la madrina el año anterior, llevando un cetro de plata, y la que lo será en 2019, quien portaba un sencillo cetro de madera. A lo visto, en esta fiesta de Hontoria, el principal protagonismo es de las mujeres, de modo que Las Candelas es allí algo similar a lo que Santa Águeda en otros muchos pueblos segovianos…
En la procesión por las calles hubo danzas y paloteos a cargo de tres grupos distintos del pueblo, con música de Los Carriolos. Llamaron especialmente la atención los paloteos, perdidos durante muchos años —16— y recuperados en 2017. Pero la función no acabó con la ceremonia religiosa, pues luego llegaba la parte profana. Ayer por la noche estaba prevista, si el tiempo lo permitía, una disco móvil, y hoy tendrá lugar la acostumbrada ‘comida de casados’, que reúne a un buen número de matrimonios de Hontoria.
