La Unión de Campesinos de Segovia-UCCL ha analizado la ejecución de la línea de bonificación de préstamos ICO-MAPA-SAECA. Es decir, una serie de ayudas para el sector financiadas por el Instituto de Crédito Oficial, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria. Una línea que ha ampliado en tres ocasiones la dotación financiera para ayudas a la bonificación de préstamos para operadores del sector agrario, incluidos titulares de explotaciones agrarias, hasta alcanzar un montante de 60 millones de euros.
Sin embargo, la UCCL el ritmo de ejecución de esta medida está siendo bajo y muy pobre: “Hasta el momento, el impacto real que ha podido tener para un sector atenazado por la sequía y el encarecimiento de los costes de producción, ha sido mínimo”, afirman desde la agrupación, que ha calificado a esta línea como un parche sin apenas efecto sobre el sector.
Hasta el 13 de marzo, el número de beneficiarios era de 2022 y el montante de ayudas de siete millones de euros. Desde entonces el Ministerio no ha hecho pública ninguna resolución más. Según el propio del Ministerio “el potencial de crédito subvencionable se eleva a 500 millones de euros. De momento se han beneficiado de esta línea unos 2.500 solicitantes, con un total de 103 millones. Esto implicaría que habría algunas solicitudes más aprobadas desde marzo, pero que apenas se ha realizado un 20,5% del total previsto.

