Concluido el estado de alarma y el cierre perimetral, la Travesía de San Rafael ha recuperado su tráfico habitual. Desde la tarde del pasado viernes se han producido retenciones en el kilómetro 58 y hasta pasado el 63 de la N-VI. Los vecinos de El Espinar llevan meses viviendo una situación anormal por la falta de coches pero este fin de semana la realidad ha regresado a la localidad.
La Guardia Civil advertía en la bajada del Puerto de los Leones de la existencia de retenciones en la entrada del municipio y en los paneles luminosos de la AP-6 también se anunciaba tráfico intenso. Cabe recordar que antes del cierre perimetral atravesaban San Rafael más de 12.000 vehículos diariamente, de los cuales el 10% eran pesados (camiones).
La mañana del sábado también fue muy intensa. Desde primera hora de la mañana se divisaba una larga hilera de vehículos que se perdía en el interior de la montaña y fueron muchos los que decidieron parar a desayunar en el núcleo espinariego, colapsando las zonas de aparcamiento y provocando retenciones durante la mayor parte del día.
La solución a este problema, que ya se ha cobrado la vida de varios vecinos, parece lejana. La travesía se encuentra en la actualidad llena de pancartas y de mensajes exigiendo al Gobierno una solución que ponga fin a los accidentes y desde la Plataforma ‘Solución Travesía de San Rafael’, en la cual se encuentran muchos familiares de las víctimas no cejan en su empeño por reclamar una alternativa.
La paz y la tranquilidad de los últimos meses parece haber desaparecido devolviendo a todos los vecinos de San Rafael a la cruda realidad del problema. Desde el Ayuntamiento trabajan para poner fin a un problema ante el que poco pueden hacer. Es el Gobierno central el que se debería hacer cargo de una costosa obra (construcción de una variante o en su caso, buscar ayudas y exenciones para diferentes tramos de la autopista AP-6, como ya reclamaron en el Congreso desde VOX.
