La empresa adjudicataria de las obras de renovación de la cubierta del Centro de Recepción de Visitantes de Segovia —la terraza de Santa Columba, como es conocida en la ciudad— está procediendo en las últimas semanas a finalizar las pruebas de estanqueidad para localizar filtraciones.
El Grupo Eficacia Global, empresa responsable de los trabajos, completó los de impermeabilización el pasado mes de abril e inició entonces la realización de pruebas de estanqueidad, una vez renovado el aislamiento con la instalación de una lámina de PVC (policloruro de vinilo plastificado), colocación de nuevo aislante y chapados de los petos perimetrales.
Las pruebas han consistido en el vertido controlado de agua inicialmente en toda la cubierta y posteriormente en puntos concretos.
El concejal de Obras, Miguel Merino, ha explicado que la «semana pasada se localizó el que parece el último punto donde todavía había filtraciones, en el baño de mujeres del CRV». Con anterioridad se identificaron las causas de otros problemas de humedades, entre ellos la propia fuente de la terraza “y puntos que no se conocían antes de las obras por los cuales asomaban filtraciones”.
Esta intervención municipal tiene un coste cercano a los 75.000 euros y está previsto que finalice en junio, tras la colocación de nuevas baldosas.

Averías
Por otro lado, en los últimos días se han producido varias averías en las redes de abastecimiento de la ciudad, entre ellas la registrada el sábado en la calle de Valdeláguila del recinto amurallado, que originó un socavón de medianas proporciones. El edil ha explicado que se detectó al mediodía y dos horas después quedó reparada. El tráfico ha estado cortado por esta vía durante el fin de semana y operarios municipales procedieron ayer a tapar la oquedad reponiendo el pavimento de adoquín.
Por otro lado, en el desarrollo de trabajos por parte de una empresa de suministro de energía eléctrica en la calle de Velarde, también en el centro histórico, los trabajadores picaron ayer por la mañana una tubería de la red de abastecimiento, lo que causó otra avería que Merino confiaba en que estuviera reparada en pocas horas.
