El CD La Granja se llevó más de un disgusto en su primer compromiso de la temporada. No solo perdió el partido frente al Real Burgos, sino que lo hizo después de encajar un gol en propia puerta y otro en el tiempo de descuento, perdió (quién sabe si para toda la temporada) a Víctor Velasco al que la sombra de la rotura del cruzado le vuelve a perseguir, y todo ello sobre un campo de patatas impropio de un pueblo como el de La Granja, cuyos jardines son envidia nacional, pero que parece incapaz de cuidar el césped de su campo de fútbol municipal de una manera mínima.
Pese a todo ello, hay detalles positivos a los que el equipo de Ricardo de Andrés puede agarrarse. Es cierto que en el arranque del choque pesaron demasiado los nervios del debut, los meses sin jugar y las novedades en todas las líneas del once, pero con el paso de los minutos el conjunto segoviano se fue haciendo a lo que le demandaba el partido, a la exigencia física de un rival que puede no ir sobrado de calidad técnica, pero que tuvo las ideas muy claras con respecto a lo que hacer en el choque, y se mantuvo vivo en el encuentro hasta que llegó su opción de darle la vuelta.
Se esperaba que en el inicio del encuentro el CD La Granja le costara un poco meterse en el choque, y el Real Burgos aprovechó este hecho para meterse en el campo local, apretar de firme en la presión y, sin poner cerco a la portería de Loren, sí ponerse el traje de dominador del partido con su defensa de tres centrales que controlaba perfectamente a Dani, y poblaba el centro del campo de jugadores ávidos de robar balones a los locales.
UN GOLAZO… EN PROPIA PUERTA
Aun así, el partido no tenía más áreas que las que se veían cuando llegaba el turno del balón parado, donde el conjunto del Real Sitio sufría alguna laguna de concentración, hasta el punto de llegar a encajar dos goles de cabeza en sendas faltas, anulados por fuera de juego. Sin embargo, en la primera acción verdaderamente peligrosa de los visitantes, tras una falta sobre Gabi no señalada en el centro del campo, David intentó despejar un centro del lateral Daniel con tan mala fortuna que terminó metiéndose un golazo de cabeza en la portería que no tocaba.
El gol dejó tocado al CD La Granja, que durante varios minutos no tuvo un buen plan con el que superar el entramado defensivo del Real Burgos, y se vio con una vía de agua en la zona izquierda, donde Cerezo imponía su veteranía. Solo cuando Velasco y Gabi cogieron balones en el centro del campo el equipo de casa logró igualar la contienda, pero sin excesiva profundidad en las acciones.
Un choque de Velasco con un rival deja al segoviano con un más que posible grave problema de rodilla
Pero un choque de Víctor Velasco con el lateral Dieguito dejó tocada la rodilla operada del segoviano, que se marchó del campo pensando que se había vuelto a romper el cruzado. Entró Berrocal en su lugar, y no desentonó en absoluto, ganando las disputas en la zona de creación.
Tras el descanso, el CD La Granja siguió remando en su búsqueda de empatar el partido, frente a un oponente que jugó a que no pasara nada en la segunda parte, apelando a su fortaleza física que llevó a sus jugadores a un desgaste intensísimo en la presión, y buscando en el balón parado sus opciones de dar el zarpazo definitivo.
MÁS OFENSIVO
Pero el cuadro local tenía las ideas algo más claras a la hora de elaborar las jugadas, aunque ni el campo ni los jugadores rivales lo pusieron fácil ni una sola vez. La entrada en el campo de Ayoud y Hamza dinamizó el juego ofensivo, y a un cuarto de hora para el final, llegó una de las acciones importantes del partido, cuando una gran jugada personal de Cuadri fue cortada en falta por Daniel a pocos centímetros del área. El árbitro (que no tuvo su mejor día) acertó al menos con la falta y la segunda amarilla para el lateral del Real Burgos.
La falta fue botada por Dani Lázaro con su calidad habitual, y rematada por Kike de manera impecable, convirtiéndose en el 1-1 que ponía al CD La Granja en disposición de darle la vuelta a un partido que tenía más que complicado, porque el Real Burgos, con un hombre menos sobre el campo y el mazazo de verse con el partido empatado cuando todo le llevaba a la victoria, parecía acusar el golpe. Una nueva acción a balón parado llevó el balón al larguero de la portería de Álex Campos después del buen remate de Dani Lázaro, pero la jugada estaba invalidada por fuera de juego.
Con un jugador más, el conjunto del Real Sitio apostó por la victoria, pero le pudo la tensión y acabó encajando el 1-2
En el tramo final del partido, y con los dos equipos muy largos en el campo (y nunca mejor dicho porque el campo de El Hospital es precisamente eso, campo), llegó el momento de los banquillos. Ricardo de Andrés apostó por la victoria, y puso en juego a Peli en lugar de David, pasando a defensa de tres, mientras que en el conjunto burgalés, Daniel Santos metía aire fresco en el centro del campo, con la presencia de Paz y reforzaba la defensa con Bellido.
Las últimas sustituciones vinieron a poner de nuevo en pie al Real Burgos, y a descolocar el esquema del CD La Granja, que de nuevo se vio con pocas ideas para llevar el esférico cerca de la frontal del área rival, y de nuevo recibiera acciones peligrosas a balón parado.
LA TENSIÓN PASA FACTURA
Los nervios ya estaban a flor de piel en los compases finales, y esa tensión vino a pasar factura a los locales, porque Sergi corrió por un balón que se marchaba a saque de puerta pensando en evitar un saque de esquina, y en su esfuerzo sufrió una más que posible rotura fibrilar en los isquiotibiales. dejando al equipo con diez porque ya se habían gastado las tres ‘ventanas’ de sustituciones que se pueden realizar.
Tardó muy poco el Real Burgos en aprovecharse de este hecho, y en una jugada mal defendida por un descolocado equipo local, el esférico fue de izquierda a derecha, por donde se coló Dieguito con fuerza, enviando el balón al segundo palo donde Paz solo tuvo que empujar el 1-2, dejando al CD La Granja compuesto y sin un punto que había trabajado de firme.
Al final del choque, era lógica la cara de decepción en los jugadores segovianos. Pero, siendo cierto que al CD La Granja le falta cierto poso en lo que al manejo de los partidos se refiere, porque la juventud de la mayoría de sus futbolistas le da mucha vitalidad, pero lógicamente poca experiencia, no es menos cierto que la propuesta futbolística es más que atractiva. Si el equipo consigue afianzarse en la parcela defensiva, cuenta con calidad en sus hombres de ataque como para poder sumar puntos en los próximos partidos. Que no en todos los partidos la suerte va a dar la espalda.
