No resulta sencillo de explicar que un conjunto que acumula tres jornadas sin perder y ha sumado cinco puntos de los últimos nueve se encuentre a día de hoy más lejos de la permanencia de lo que se encontraba hace tres semanas. Pero es que a la Segoviana no le están pasando situaciones demasiado normales en una temporada extraordinariamente compleja en una Primera RFEF en la que el pasado fin de semana ni uno solo de los diez primeros clasificados fue capaz de ganar su partido.
Pero, siendo ciertos los fríos números, la sensación es que el equipo gimnástico ha logrado encontrar el camino perdido en el inicio del curso, y que le llevó a encajar una demoledora racha de partidos sin ganar que terminó con la Segoviana en los puestos de descenso.
Eso es pasado, y el pasado apenas sirve para aprender a no cometer los mismos errores. Y, como quiera que el futuro es (Putin mediante) un asunto desconocido, habrá que centrarse en un presente que pasa por la cita frente al Amorebieta en la mañana del domingo (12.00 horas), en una cita más que exigente aunque a estas alturas de la liga todas lo sean.
EL RIVAL NO HA GANADO FUERA
El conjunto vasco ha logrado reaccionar de la mano de su nuevo entrenador Nacho González, pero todavía no le llega para alcanzar las posiciones de permanencia. Situado a tres puntos de la Segoviana, el rival de mañana aspira a lograr una victoria que le ponga por encima de los azulgranas en la clasificación.
La intención de la Segoviana pasa por sumar los tres puntos y dejar al Amorebieta a seis, que serán siete al tener ganado el average ya que en la ida venció por 0-1. Y para ello hay un plan de partido, que pasará por poner un ritmo alto y buscar la contundencia en el área rival y así romper el muro defensivo de un equipo que suma seis partidos consecutivos sin recibir más de un gol, pero que está siendo poco contundente lejos de su campo, ya que no conoce la victoria como visitante, habiendo sumado solamente cuatro puntos.
Pero las estadísticas sirven solamente para llenar páginas, y la Segoviana necesita ganar sin importar ni el nombre ni la trayectoria del rival si quiere seguir aspirando a la permanencia. Porque todos los equipos están apretando, y este es un hecho incuestionable, pero si el equipo de Ramsés Gil logra sumar los tres puntos, con seguridad se acercará a los puestos de salvación.
RAMSÉS
Ramsés dejó claro en la previa del partido que éste no se iba a parecer en casi nada al de la primera vuelta que terminó con la victoria de la Segoviana, ya que el Amorebieta ha cambiado de técnico, “y ahora tiene uno top totalmente”, y ha encontrado la manera de ir sumando puntos.
“El Amorebieta es un rival super potente que está sufriendo allí abajo pero que no deja de tener un equipazo. Lleva toda la temporada sin conseguir salir de la zona de descenso, y sin embargo da la sensación por los últimos partidos que no se va a parecer mucho al que vimos en la primera jornada. Es un equipo distinto y tiene un entrenador distinto, top totalmente. Nacho González es un entrenador de un nivel altísimo y el equipo lo está haciendo bien. Están competiendo bien, en casa se han hecho fortísimos con un sistema que les está funcionando, con tres centrales. Buscando otras alternativas a las que tenía anteriormente en la parcela ofensiva están consiguiendo hacerse más sólidos y sacar más puntos, que al final es de lo que se trata. Entonces el partido poco va a tener que ver con lo que vimos en la primera jornada”.
Por su parte, el entrenador del Amorebieta también mostró la necesidad de ganar de su equipo al señalar en la previa que “el mensaje y el objetivo es claro, hay que ganar. Nos estamos preparando para ello y tendremos que ver si somos capaces de conseguirlo”.
