Javier Martín
La época estival ha superado ya sus dos terceras partes del camino, y aunque el fuerte calor ha sido la nota principal en la provincia, con temperaturas normalmente superiores a los treinta grados y noches tórridas en las que el termómetro no ha bajado de los veinte, la vaguada de tormentas de las últimas jornadas ha provocado que el calor haya ido remitiendo, sobre todo en el horario nocturno, un hecho que vendrá a favorecer el trabajo de los servicios de prevención y extinción de incendios que de nuevo han vuelto a tener un verano más que intenso, con más de ochenta intervenciones desde que se abriera la campaña a mediados del mes de junio, actuaciones que superan de largo el centenar contando las realizadas en los seis primeros meses del año.
Sin embargo, y dentro de lo que se refiere a incendios forestales, Segovia se está mostrando como una de las provincias que más control está ofreciendo tanto en lo que a los propios incendios se refiere, puesto que los 35 que sufrió hasta el 31 de julio se quedan muy lejos de los 65 de Palencia, los 54 de Burgos o los 49 de Ávila, como en la superficie afectada, ya que la actuación de los servicios de extinción de incendios consiguió que de los 35 incendios registrados en los primeros siete meses del año en la provincia, tan solo tres entraran en esa categoría (entendiendo como incendio la quema de una superficie que supera la hectárea), mientras que 32 se quedaron en conatos que no llegaron a la hectárea de superficie quemada.
Todos los incendios forestales de la provincia hasta el mes de agosto no llegaron a sumar diez hectáreas, siendo afectadas 2,63 hectáreas de masa arbolada, 1,04 hectáreas de matorral y monte bajo, y 4,96 hectáreas de pastos.
Los datos son más que buenos teniendo en cuenta que en la serie ya entra el mes de julio, uno de los más calurosos del año que también destaca por sus cosechadoras recogiendo los cereales sembrados en los campos de labor. Pero sin duda el mes más complicado en lo que a incendios se refiere es el mes de agosto, puesto que el calor reseca la tierra y cualquier chispa tiene una alta capacidad de originar un incendio.
Así sucedió en los dos incendios más importantes que ha registrado la provincia de Segovia durante esta época estival. Apenas iniciado el mes de agosto, un rayo caído en la zona de la garganta del río Moros permaneció latente hasta que las condiciones climatológicas fueron propicias para que de la chispa surgiera una llama que puso en alerta máxima a los servicios de extinción, puesto que la zona, de difícil acceso por tierra, forma parte del Parque Natural se la Sierra del Guadarrama.
Y por ello la treintena de medios aéreos y terrestres destinados al incendio actuaron con mucha celeridad. Tanta que un incendio declarado de Nivel 1 (el único de todo el año en Segovia) por una posible afectación de más de 30 hectáreas de masa arbolada quedó controlado menos de 24 horas más tarde, con una afectación de solamente cinco hectáreas.
En lo que a pastos se refiere, el incendio de Navas de San Antonio del 12 de agosto entre las carreteras SG-500 y la N-VI se lleva sin duda la palma. Más de cien hectáreas quemadas y un buen número de medios trabajando durante varios días en la zona reflejaron la importancia de un incendio que hasta la fecha ha quedado como el más importante en cuanto a superficie de los que se ha producido en la provincia.
Del centenar largo de incendios en la provincia a lo largo del año, los equipos de investigación han esclarecido el origen de más de la mitad de ellos. Así, una treintena de los incendios producidos este año en la provincia tienen como causa probable una accidente, ya sea por la acción de los ‘motores y máquinas’ como se explican en los partes diarios de incidencias de la Junta de Castilla y León, o por el mal funcionamiento de las líneas eléctricas.
Las negligencias también tuvieron su cuota de protagonismo en los incendios de Montejo de Arévalo, Navalmanzano o Arroyo de Cuéllar, mientras que las tormentas han protagonizado una decena de incendios en los ocho primeros meses de 2024.
Además, de una docena de los siniestros no se llegará a conocer la causa, mientras que casi medio centenar de los incendios continúan en proceso de investigación.
La Junta invierte más de seis millones de euros en mejorar los centros de mando e incorporar un puesto avanzado
J.M.A. / ICAL
El nuevo sistema de vigilancia de incendios implantado por Medioambiente es una estructura compuesta por nueve centros, uno por provincia, y coordinada desde un décimo en Valladolid.
Dotar a todos los centros de mando provinciales ante incendios de la Comunidad, entre otras mejoras de un módulo rápido y ágil, instalado a bordo de un todo terreno, que puede funcionar como puesto avanzado móvil ha supuesto una inversión de más de seis millones de euros
Estos vehículos todo terreno incorporados a cada centro de mando provincial sirven como puesto de mando avanzado. Cuentan con su propia energía solar a través de generador, tienen su propia estación meteorológica, su propia estación de comunicaciones y pueden realizar radioenlaces con otros vehículos, además de contar con su propia oficina.
En conjunto, la adquisición y la dotación de los nueve vehículos ha supuesto un desembolso de 576.000 euros. Estos vehículos ahora funcionan como plataformas tecnológicas móviles que permiten la coordinación, comunicación y planificación en las operaciones de extinción de incendios forestales.
Suárez-Quiñones especificó en su visita en agosto al centro Provincial de Mando del Operativo de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Salamanca que además se ha mejorado la conectividad de los centros con el territorio y modernizado los equipos tecnológicos existentes en los centros de mando en las oficinas comarcales, dotando de dispositivos al personal de campo.
Así, se han adquirido pantallas digitales para todos los centros de mando: 76 monitores de 27 pulgadas, 608 monitores de 21,5 pulgadas, 429 ordenadores de sobremesa, 546 cámaras web y accesorios, 60 ordenadores portátiles y 458 tabletas. Además, esta línea de financiación ha permitido obtener 140 unidades de geoposicionamiento para vehículos autobomba, puestos de mando avanzado y pick-ups.
Por otro lado, se ha invertido en la ampliación de la plataforma única de gestión de la información de incendios forestales ‘Sinfo’, que se ha visto mejorada en cuando a accesibilidad y funcionalidades. Además, se ha podido integrar a la plataforma las imágenes satelitales de Sentinel antes y después del incendio para perimetrar los mismos y analizar la severidad. Se han integrado capas de meteorología y riesgo y los sistemas de video vigilancia y se han desarrollado utilidades relacionadas con perímetros y puntos de inicio disponibles, para todo el trabajo de análisis estadístico posterior.
Asimismo, como mejoras fundamentales en el desarrollo de aplicaciones, se ha puesto en marcha Inforcyl, que permite que los datos generales de ‘Sinfo’ se pongan a disposición de la población y que se puedan consultar en tiempo real todas las intervenciones del operativo, así como los medios de extinción desplazados y las superficies afectadas y causas de los incendios.
