Las intervenciones de agentes de la Policía Local por asuntos de ruido en Segovia capital se han convertido en uno de los problemas que se registran casi a diario. A lo largo del mes de septiembre, con el inicio del curso académico, según expone la Plataforma Contra el Ruido en Segovia -creada en el mes de abril-, «la tensión en la ciudad está aumentando por momentos». «Si bien existe mayor interés por parte del Ayuntamiento, y se aprecian algunos gestos en el control del ruido nocturno en algunas zonas, las actuaciones siguen siendo insuficientes», sostiene el colectivo.
Representantes de la Plataforma se reunieron recientemente con el alcalde de Segovia, José Mazarías, y los concejales de Seguridad Pública, Raquel Alonso, y de Urbanismo, Alejandro González, para conocer el plan de acción del Consistorio en materia de ruido.
Desde la Plataforma agradecen el interés mostrado por el Ayuntamiento respecto a sus demandas y propuestas de modificación de la Ordenanza municipal del ruido, tramitación de los nuevos expedientes y agilización del proceso de denuncia; aunque lamentan que «no rectifique su actitud de dejación de funciones ya que, si bien se comprometieron a tramitar las denuncias que se cursen a partir de ahora (sin fijar exactamente a qué hace referencia ese “ahora”), nos transmitieron su negativa a tramitar los expedientes no prescritos anteriores a su entrada en el Consistorio».
Asimismo, desde el Ayuntamiento se comprometieron a valorar la adquisición de nuevos sonómetros, si bien su compra queda condicionada a los fondos presupuestarios disponibles. La Plataforma Contra el Ruido en Segovia considera que la compra de nuevos sonómetros «no puede ser eludida».
Por último, la Plataforma quiere destacar la necesidad de modificar la Ordenanza municipal sobre ruido, en especial en relación a la eliminación de las trabas para la apertura de un expediente. «Consideramos imprescindible eliminar de la Ordenanza la necesidad de denunciar por escrito después de llamar a la Policía Local, hacer que los agentes denuncien de oficio, y evitar así molestias innecesarias a los afectados durante las mediciones de ruido», explica el colectivo.
