Veinticuatro horas después de que prácticamente la totalidad de la plantilla del Viveros Herol Nava, más algunos componentes del cuerpo técnico, mostraran síntomas de gastroenteritis de tal magnitud que provocaron el aplazamiento del encuentro que el conjunto segoviano debía disputar en León, poco a poco el conjunto segoviano va recobrando la normalidad, si bien es cierto que en la jornada del domingo varios de sus componentes todavía se encontraban más que renqueantes después de una jornada de sábado más que complicada.
El club no descarta ninguna opción en lo referente al origen de las dolencias de la plantilla, ni que se tratara de un virus intestinal de los que normalmente suelen proliferar en esta época del año, ni que jugadores y cuerpo técnico pudieran haber sufrido una intoxicación alimentaria. De momento lo que está primando es la salud de los componentes del equipo, y tiempo habrá para buscar responsables, si los hubiera.
Sea como fuere, en el apartado deportivo el aplazamiento del partido en León no ha venido a empeorar la situación clasificatoria del Balonmano Nava, que se mantiene en la plaza de promoción a División de Plata, antepenúltimo sólo por delante del Horneo Alicante y el Balonmano Guadalajara con los que se encuentra empatado a puntos y sólo supera en el gol/average general.
De cara a la próxima jornada, el club confía es que la plantilla pueda comenzar a entrenar con normalidad a partir de hoy, preparando el partido frente al Rebi Cuenca que acogerá el pabellón Guerrer@s Naver@s.
