El salón de plenos del Ayuntamiento de la villa fue el escenario de la sesión extraordinaria celebrada ayer por la mañana con motivo de la aprobación de los presupuestos generales de 2018. Tras la votación de la enmienda para la eliminación de dos columnas comparativas de años anteriores, el interventor procedió a la lectura del presupuesto. El montante, como ya anticipó el equipo de Gobierno, asciende a 7. 638. 628 euros, con un ligero ascenso respecto al de 2017, cuya cifra final fue de 7.608.000 euros. Jesús García, alcalde de Cuéllar, reiteró que se trata de unos presupuestos “sociales y solidarios” basados en la congelación de tasas e impuestos, con un nivel de endeudamiento previsto del 34%.
Los grupos de oposición, tanto Izquierda Unida y sus dos concejales, como el Partido Socialista con sus cuatro -tres presentes en la sesión-, mostraron su inconformidad, desacuerdo e insatisfacción con los distintos capítulos y partidas de este presupuesto. IU, a través de su concejal Alberto Castaño, expuso con contundencia su desaprobación. Aseguró que no se trata de presupuestos “ni sociales ni solidarios”, con un “paupérrimo capítulo de inversiones” y que no tiene en cuenta las necesidades de los vecinos. Comentó que la gestión de este equipo de Gobierno se basa en “no hacer nada pero decir que hacen de todo”. Señalaron también que no son sociales, pues echan en falta más servicios sociales básicos, y respecto a si son solidarios, aseguran que se confunden: “Está ejerciendo la caridad, no la solidaridad, con dinero que no es suyo, como si esto fuera su cortijo”, comentó el edil dirigiéndose al regidor local. Este le contestó que esperaba enmiendas a estos presupuestos, no citas de textos “que solo han hecho que aburrirnos”; “hay que saber con qué posibilidades contamos y ser más coherentes”, añadió el alcalde, que tildó el discurso de IU de demagógico y repetitivo.
Por su parte, el PSOE local no se quedó atrás en disconformidad. Carlos Fraile, portavoz del grupo municipal, aseguró que en este tercer presupuesto que se presenta en la legislatura hay un “inexistente trabajo político”. Reiteró que se trata de un presupuesto que nace hipotecado por la regla del gasto y comentó que no se hace eco de las necesidades más acuciantes de la población, que se trata de una gestión personalista y que este Gobierno no tiene claro hacia dónde quiere que vaya Cuéllar. Criticaron el gasto en difusión cultural y turística a pesar de estar de acuerdo en la realización de actividades, la gestión del Centro Municipal de Alimentos, el ascenso de 24.000 euros en el canon de vertidos y otros gastos que no consideran tan demandados.
El alcalde volvió a defender la gestión y a pedir a la oposición socialista enmiendas, propuestas, algo que Fraile explicó no presentar porque el Gobierno “con su mayoría absoluta, va a echar para atrás”. Jesús García defendió de nuevo que las acciones que el Ayuntamiento local va a realizar con las partidas previstas son parte de un consenso, aunque la oposición no cree que los presupuestos estén siendo participativos, ni en esta, ni en el resto de ocasiones anteriores.
Finalmente, la votación del pleno permitió la aprobación a los presupuestos, con siete votos a favor y el resto en contra, como ya manifestaron en sus intervenciones los grupos municipales de oposición.
