La Mesa del Parlament aprobó ayer que la Cámara se querelle contra el juez del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena por presunta prevaricación al negarse a dejar acudir al pleno de investidura al candidato de JxCat a presidir la Generalitat, Jordi Sànchez.
Fuentes parlamentarias explicaron que la decisión se tomó con los votos a favor de JxCat y ERC, que tienen mayoría en el órgano rector de la Cámara, y a propuesta del presidente de la institución, Roger Torrent.
Las mismas fuentes explicaron que los letrados del Parlament expresaron sus dudas de que la Cámara pueda iniciar una acción judicial así y consideran que debería ser Sànchez a título personal o su grupo parlamentario quienes asumieran una iniciativa así.
La querella se presentará contra Llarena y contra los otros magistrados de la Sala Penal del Supremo, detallaron por su parte otras fuentes parlamentarias.
Aparte de JxCat y de ERC, en la Mesa están representados los grupos de Ciudadanos y del PSC, que mostraron su profundo rechazo a que el Parlament presente una querella de este tipo.
Propuesta de los comuns
Fuentes de Ciudadanos consideraron que la Cámara podría incurrir en una ilegalidad destinando recursos públicos a defender “el interés de un particular”, en alusión a Jordi Sànchez.
Además, también señalaron que se abre el precedente de que cualquier diputado con causas pendientes con la justicia pueda solicitar al Parlament que sea la Cámara quien asuma sus acciones judiciales.
En las reuniones de la Mesa participan el letrado mayor del Parlament, Antoni Bayona, y el secretario general de la Cámara, Xavier Muro, que avisaron de que no son “expertos” en esta materia y que no son los adecuados para materializar una querella así.
Pese a esta advertencia, el presidente de la Cámara, Roger Torrent, insistió en que sean ellos los que lleven a cabo la querella por presunta prevaricación.
De su parte, los comuns —que asisten a la Mesa con voz pero sin voto, como CUP y PP— plantearon consultar a “penalistas externos” la idoneidad de presentar esta querella, pero la propuesta ha sido rechazada.
Además, los comuns (CatECP) también plantearon presentar antes una queja formal al Supremo, pero esta idea también ha sido rechazada por Roger Torrent.
El presidente del Parlament anunció el jueves que presentaría una querella contra el magistrado del Alto Tribunal Pablo Llarena después de que éste no permitiera salir a Jordi Sànchez de prisión para acudir a su investidura alegando que persistía el delito de fuga en el prisionero.
